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viernes, marzo 29, 2024

Evaluarán si hombre que mató niño en Guaimaca está loco o se drogó

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Tegucigalpa, Honduras.- Dos pruebas: una toxicológica y otra psiquiátrica, determinarán si el sujeto acusado de matar a machetazos al menor Jeremy Zúniga en Guaimaca, Francisco Morazán el pasado lunes, estaba bajo el efecto de alguna droga al momento del atentado.

El sujeto, aparentemente le quitó la vida al menor de 10 años luego de que éste se negó a darle un jugo. Los familiares del niño afirman que el sospechoso estaba bajo el efecto de las drogas y aseguraron que es un enfermo mental.

El subcomisario Christian Nolasco, portavoz de la Dirección Policial de Investigaciones (DPI), confirmó a DIARIO TIEMPO que ya se inició el proceso judicial contra este individuo, de nombre Roger Uriel Gálvez.

Sin embargo, destacó que serán un análisis médico y clínico los que confirmen o descarten la hipótesis de que el sujeto es un enfermo mental y drogadicto.

«Al sospechoso hay que llevarlo a Medicina Forense, porque es el Ministerio Público el encargado de determinar si tiene problemas mentales, psicológicos y psiquiátricos. Incluso se remite a Toxicología Forense para verificar si ha consumido algún tipo de drogas o alcohol», detalló Nolasco.

Al sujeto le practicarán varias pruebas para determinar si estaba drogado o alcoholizado cuando mató al niño.

Detención judicial de manera inmediata 

Al sospechoso se le dictó detención formal, según detallaron las autoridades policiales. Luego se le remitió de inmediato a los juzgados, por el delito de homicidio; no obstante hay que hacer una recalificación del delito para poder pasar de homicidio a asesinato.

En tal sentido, Nolasco destacó que el proceso está en la etapa inicial y serán el psiquiatra y el psicólogo quienes examinen al sospechoso y emitan un dictamen profesional.

Solo un diagnóstico especialista puede determinar o descartar sin, en efecto, el ciudadano no esta en sus facultades. Es por ello que se orienta el caso y el acusado puede pasar a un ciudadano inimputable.

Lea además: VIDEO| Así capturaron a sospechoso de matar niño en Guaimaca

Los casos los ejecutan todos los operadores de justicia 

Por otro lado, Nolasco destacó la importancia y el papel que juegan todos los operadores de justicia en estos casos. En el caso de seguridad entregan las pruebas técnicas y científicas de la escena del crimen y luego procede el fiscal, quien también dicta las medidas a los sospechosos.

Asimismo, indicó que las pruebas proceden a una evacuación en las audiencias y son las que determinan la culpabilidad del imputado. En este caso, existen pruebas como el machete ensangrentado y la camisa, pero también se van a tener que someter a exámenes especializados.

Nolasco
Christian Nolasco, portavoz de la DPI.

«Aunque el machete esté manchado de sangre, tenemos que confirmar que la sangre que esta allí es del menor, pero bajo las pruebas correspondientes al niño. Hay que verificar también que la sangre que se encontró en una camisa corresponde al niño Jeremy», indicó el portavoz de la DPI.

Otra de las pruebas que intervendrían en el caso son las testificales de las personas que presenciaron el hecho violento.

«Lo que si se está analizando es el estado mental del sospechoso, porque los padres del niño pueden decir que tiene problemas mentales. Sin embargo eso lo tiene que decir el psicólogo y psiquiatra forense», reiteró Nolasco.

Sospechoso 3
Al sujeto le deberán realizar una investigación minuciosa de su salud mental.

De igual manera, habría que revisar expedientes clínicos anteriores. Esto para conocer si se trató un problema mental o psiquiátrico lo acontecido.

¿Qué pasa si se confirma que tiene problemas mentales?

En caso de que un experto certificado por Medicina Forense confirme que, en efecto, el sospechoso tiene problemas mentales, Nolasco explicó que el sujeto se convierte en inimputable.

Es decir, que el sujeto que al ejecutar la conducta típica no estaba en condiciones de conocer y comprender su antijuridicidad o de orientar su comportamiento de conformidad con dicha comprensión. Lo anterior puede darse por inmadurez psicológica, trastorno mental o circunstancias socioculturales específicas

Asimismo, Nolasco detalló que al sospechoso de primera instancia en el proceso investigativo y el un informe a 24 horas se le remitió por el delito de homicidio.

Sin embargo, a raíz de la documentación del expediente investigativo y tras la audiencia de declaración de imputado, el juez de Talanga le dio al sospechoso la medida de prisión preventiva.

La audiencia inicial quedó programada para el 11 de noviembre del 2022. En este periodo de días, el juez va ordenar que se le practiquen las pruebas expuestas y determinar si en realidad este sujeto estaba los efectos de las drogas o tiene problemas mentales.

Y en efecto, el juez tras revisar la prueba realizada por la DPI, recalificó el delito y de homicidio lo elevó a asesinato.

«Pasa a asesinato por la ventaja, alevosía y lo que lo llevó a quitarle la vida a un niño de 10 años. Él andaba valiéndose de que era un niño (víctima) y él (agresor) andaba un arma blanca tipo machete», cerró Nolasco.

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