Redacción. «Me dijeron un precio y cuando terminaron el trabajo me dieron otro, y era mucho dinero. Les dije que no andaba y me amenazaron. Sentí miedo porque sucedió en una zona caliente, temí por mi vida», relató don Selvin, un sampedrano víctima de los estafadores que ofrecen colocar piezas o accesorios para vehículos en el barrio Medina de San Pedro Sula, Cortés.
De acuerdo con diversas denuncias, decenas de hondureños han sido estafados y robados en las afueras de una tienda de repuestos ubicada en el populoso barrio sampedrano. Los casos de estafa se reportan en diversos puntos de la capital industrial.
Diario TIEMPO se contactó con dos víctimas de esta modalidad de delito. Una de ellas, don Selvin, relató que tuvo un incidente de este tipo cuando fue a una tienda de repuestos a comprar unos empaques para la puerta de su carro.
Al salir con los empaques, los supuestos vendedores comenzaron a acercársele y le dijeron que ellos se lo colocaban. Aseguró que fue tanta la insistencia de aquel hombre que tuvo que acceder.
«Me dijeron que me cobraban 30 lempiras por poner el empaque de dos puertas. Lo vi barato y accedí. Cuando terminaron, me salieron que 30 por pie, al final querían cobrarme más de 2 mil lempiras«, reveló.
Don Selvin se negó a pagar esa cantidad, pues aseguraba que ese no era el trato. Sin embargo, se sintió intimidado, pues varios hombres comenzaron a levantarle la voz al mismo tiempo y hasta lo amenazaron.
Al verse presionado, reflexionó que podría correr peligro su vida, por lo que no tuvo más remedio que darles el dinero que pedían.
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Asimismo, otra hondureña, quien decidió omitir su nombre por seguridad, reveló que no sólo la estafaron, sino que le robaron.
«Fui a ese lugar donde venden repuestos porque me lo recomendaron, fui a buscar un espejo. Al salir, los vendedores siempre te ofrecen colocarlos y como me estaban dando buen precio, accedí, pero al final me cobraron más de lo que me dijeron. Cuando llegué a mi casa vi que unas piezas pequeñas que se ubican a la par del retrovisor ya no estaban», testificó.
La hondureña contó que los supuestos vendedores asechan afuera del negocio a sus víctimas y luego insistirle al punto de intimidarlo.
«Yo sabía que ellos me habían robado esas piezas de los carros. Pero no podía ir a reclamar, pues no es una zona segura y no denuncié porque la Policía nunca hace nada», indicó.
Modus operandi
De acuerdo con las investigaciones realizadas, estos sujetos se instalan en las afueras de las tiendas de repuestos, interceptan a las personas y ofrecen sus servicios.
Para que los clientes acepten, dan precios cómodos y al terminar de instalar la pieza los aumentan.
Luego, comienzan a acorralar a la persona para que pague el último precio dado, aunque este no haya sido el pautado inicialmente. Si el cliente se resiste, comienzan a amenazar.
Mientras tanto, otro de los vendedores aprovecha para quitar ciertas piezas del automóvil y luego se colocan en otro punto de la ciudad para venderlas.
Lugares donde suceden estos ilícitos
Según testimonios de las personas en redes sociales, hay diferentes puntos de la ciudad donde sujetos venden y colocan accesorios para los vehículos.
-Fuente Luminosa
-Salida vieja a la Lima
-1 Calle
-Bulevar Juan Pablo II
Daniel Hernández, socio de un taller de mecánica automotriz, explicó a Diario TIEMPO que es un riesgo que las personas instalen repuestos en la calle o en lugares de dudosa reputación.
«El problema es que lo barato siempre sale caro. Yo siempre recomiendo que busquen un taller calificado para instalar cualquier pieza del auto, por mínima que sea. En la calle, si te ponen una pieza, te quitan dos y luego la andan vendiendo», indicó.
Hernández sostuvo que lo mejor que puede hacer un cliente es avocarse a su mecánico de confianza.
«Por ejemplo, en mi taller yo le busco la pieza a mi cliente y le garantizo un buen trabajo. La gente se puede quejar de que sale más caro y que (el trabajo) es sencillo, pero al final siempre es buena idea apegarse a un experto y más si es de su confianza, porque no lo va a engañar», indicó.
Recomendaciones de la Policía
Diario TIEMPÓ contactó al subinspector de la Policía Nacional, Carlos Figueroa Valeriano, quien dio algunas recomendaciones a los hondureños para evitar ser estafados.
«En primer lugar hay que conocer el origen de las piezas. Normalmente estas personas que venden piezas en las calles, avenidas y de manera libre a precios muy baratos o demasiados caros tienden a ser de dudosa procedencia», comentó.
El oficial recomendó que las personas deben consultar a las tiendas de repuestos que les ofrezcan una garantía y que tengan un distribuidor oficial.
Asimismo, Figueroa habló sobre los vendedores que cobran por instalar las piezas o accesorios a los automóviles.
«En caso de estafas se debe hablar a la línea directa de la Dirección Policial Anti Maras y Pandillas Contra El Crimen Organizado (DIPAMPCO), a la Dirección Policial de Investigaciones (DPI) o ir a la posta policial e interponer la denuncia», sugirió.
Finalmente, recomendó a los ciudadanos ir donde un mecánico para instalar los repuestos, y siempre consultar con un experto.