TEGUCIGALPA, HONDURAS. La pastora María Elena de Barahona, esposa del fallecido pastor Mario Tomás Barahona, permanece luchando contra el COVID-19 en un centro asistencial privado de la capital.
Tras trascender en redes sociales que había muerto, el pastor Alberto Solórzano informó que doña María Elena está librando la difícil batalla y pidió oración para ella.
Asimismo, familiares, a través de las redes, desvirtuaron la muerte de la pastora e invitaron a orar por su vida este día a las 10:00 de la mañana en la iglesia Mi Viña.
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La pastora esta luchando
El pastor Alberto Solórzano declaró en Radio América que «ella (pastora María Elena) sigue luchando contra el COVID 19, su situación es crítica y delicada, pero se encuentra estable”.
Al parecer, gran parte de la familia del pastor y la pastora están contagiados de COVID-19, pero ella permanece hospitalizada.
El pastor Mario Tomás Barahona, de 65 años de edad, perdió la batalla contra el virus el pasado viernes a las 11:00 de la noche. El religioso permaneció interno en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) del Hospital Cardiopulmonar del Tórax, sin embargo, sus complicaciones no lo hicieron resistir.
Su cuerpo fue reclamado hasta domingo y posteriormente trasladado hasta los jardines San Miguel Arcángel para darle cristiana sepultura y los oficios religiosos.
El pastor Mario Tomás Barahona falleció y no tenía aplicada ni una dosis de la vacuna contra el COVID-19. El religioso alegaba que eran «armas» y que no se la pondría.
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