El guardameta holandés Marco Bizot, de 25 años, sufrió una escalofriante lesión en el fútbol de Bélgica.
Fue durante el triunfo por 3-0 de su equipo, el KRC Genk, ante el Kortrijk de la Jupiler Pro League.
El guardameta terminó con un grave esguince en el tobillo tras sacar de volea para tomar al equipo contrario descuidado.
Su ejecución se perdió por la banda lateral y él quedó tendido en el suelo, el árbitro se percató y detuvo el juego.
El guardameta del Genk, que ya ganaba 1-0 desde los cuatro minutos, se lastimó a los 8 minutos
Tuvo que ser retirado en camilla tres minutos más tarde. El joven Nordin Jackers, de 19 años, ingresó en su lugar.