Redacción. El actor de la saga Fast and Furious, Tyrese Gibson, se entregó a las autoridades el pasado viernes, enfrentando un cargo por crueldad animal después de que su manada de perros supuestamente atacara y matara al perro de su vecino.
La estrella, conocida por su papel de Roman Pearce, se presentó en la cárcel del condado de Fulton poco antes de las 6 a. m. y fue liberado luego de pagar una fianza de $20,000.
El incidente ocurrió la noche del 18 de septiembre, cuando los cuatro mastines Cane Corso de Gibson escaparon de su propiedad. Según la policía, fue el sexto escape de los animales en tan solo una semana.
La manada atacó y mató a Henry, un King Charles Cavalier Spaniel de 5 años, cuyo dueño, Harrison Parker, encontró el cuerpo en el jardín. «Perdí a mi mejor amigo de la peor manera», declaró Parker a Fox 5 Atlanta.
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Imágenes de una cámara de seguridad, obtenidas por CBS News Atlanta, mostraron a los perros (utilizados comúnmente como guardianes) merodeando e incluso arañando la puerta principal del vecino momentos antes de la tragedia.
Acosadores
A través de su abogado, Gabe Banks, Gibson afirmó que no estaba en casa durante el ataque. El actor, quien adquirió los perros hace menos de cuatro años para proteger a su familia de «acosadores», expresó su profundo pesar en un comunicado.
«Mi corazón está roto por ustedes. Estoy orando por su sanación y por su querida mascota, que nunca mereció esto», escribió el actor y cantante de R&B.
A pesar de las múltiples advertencias policiales previas sobre la seguridad de los caninos, Gibson no cumplió el plazo del 22 de septiembre para entregarlos a control animal.
Su abogado confirmó que, después de la tragedia, el actor tomó la decisión inmediata de reubicar a sus dos perros adultos y sus tres cachorros antes de que las autoridades regresaran con una orden de incautación y posterior orden de arresto, el 29 de septiembre.
