REDACCIÓN. Gloria Marina López Pineda, acusada del delito de parricidio por la presunta muerte de su hija recién nacida, podría enfrentar una pena de hasta 33 años y 4 meses de prisión, de acuerdo con lo establecido en el Código Penal de Honduras.
El artículo 194 de dicho código define el parricidio como el acto de quitarle la vida a un ascendiente, descendiente, cónyuge o persona con la que se mantenga una relación estable de naturaleza similar. La condena base para este delito es de 20 a 25 años de prisión. Este tipo de delitos está catalogado como uno de los más graves dentro del marco legal hondureño, ya que atenta directamente contra los lazos familiares y la integridad de los miembros más vulnerables.
La pena podría agravarse si se comprueban circunstancias específicas como ensañamiento, premeditación o cualquier otra condición que denote mayor crueldad en la ejecución del crimen. En estos casos, el Código Penal establece un aumento de un tercio sobre la pena máxima. Esto elevaría el castigo a 33 años y 4 meses de cárcel. Estas agravantes reflejan un mayor grado de peligrosidad y frialdad en el acto cometido, lo cual justifica el incremento en la condena.
Le puede interesar: Requerimiento contra empleada doméstica por quitarle la vida a su bebé en SPS
El caso salió a la luz el pasado 11 de mayo en una vivienda ubicada en la residencial Santa Mónica, donde López Pineda laboraba como empleada doméstica. Según el requerimiento fiscal, su empleadora la encontró ensangrentada en el baño, lo cual despertó una inmediata preocupación. Ante el estado crítico en el que se encontraba, la trasladaron al Hospital Mario Catarino Rivas, donde los médicos confirmaron que acababa de dar a luz. Esta revelación desencadenó una serie de eventos que llevaron a su arresto.
Preocupada por lo sucedido, la empleadora regresó a la vivienda. Al inspeccionar el baño, encontró el cuerpo sin vida de la recién nacida, envuelto en una toalla. A la pequeña la trasladaron al centro asistencial, donde se confirmó su fallecimiento. El informe médico detalló que la bebé presentaba heridas provocadas por un arma punzocortante, incluida una en el cuello. Además, el hallazgo del cuerpo en las condiciones descritas sugiere un intento de ocultamiento del hecho. Lo cual se puede tomar en cuenta por las autoridades al momento de valorar los elementos del caso.
La audiencia inicial está programada para el próximo lunes 19 de mayo a las 10:00 de la mañana en el Juzgado de Letras Penal de San Pedro Sula.