TEGUCIGALPA. Emilio Silvestri, titular del Instituto Hondureño de Turismo (IHT), expresó este viernes que el actual aeropuerto de Tegucigalpa no permite a Honduras ser competitivo en materia turística, por lo que está de acuerdo con la construcción de Palmerola pero consideró que tampoco debe cerrarse pues una capital no puede quedarse sin una terminal aérea.
El director del IHT, manifestó que “nosotros tenemos que ver, hay dos puntos en discusión, los vuelos nacionales y los internacionales, hay algunos factores que impiden que a Tegucigalpa bajen los precios y uno de ellos es la competencia, se necesitan tener más vuelos”.
Asimismo dijo que “muchas líneas aéreas no llegan a Tegucigalpa por la restricción de la pista, tenemos que ser muy sinceros, el Toncontín queda siempre entre los aeropuertos más peligrosos del mundo, se trata de una ubicación geográfica, no es una cuestión de gobierno”.
Silvestri explicó que “esta situación de Toncontín, nos impide muchas veces ser competitivos para la llegada de nuevas líneas aéreas, además se pagan seguros aéreos muy altos para los vuelos grandes, los vuelos nacionales es otra historia”.
“Si como país, queremos que Tegucigalpa sea competitivo, desde el punto de vista internacional con vuelos tras atlánticos de Europa o cualquier otras zona de donde vengan aeronaves grandes, deben haber cambios, pues siempre el aeropuerto de Toncontín tendrá esas limitantes”, recomendó.
Vea también:Ciudadanos protestan por cierre de Toncontin
Indicó que “hay que apoyar a Tegucigalpa, es nuestra capital buscaremos mantener esa conectividad, es la orden del presidente que se busquen alternativas para mantener abierto el Toncontín y que funcione con vuelos nacionales”.
“El actual aeropuerto afecta en el sentido de que los vuelos nacionales, Tegucigalpa sigue siendo el principal fuente emisor, pero ya el presidente (Juan Hernández) ha dado la orden las diferentes secretarías, a fin de que puedan negociar las concesiones que se tienen con la empresa que gano la licitación de Palmerola”, concluyó.
