TEGUCIGALPA. – El empresario y presidente del Club Deportivo Olimpia, Rafael Ferrari, dejo un gran legado en Honduras, sin embargo su hija Giannina asegura quien no cumplió todos sus deseos.
Ferrari falleció el pasado miércoles 12 de diciembre mientras sufría un infarto en un avión que se dirigía a Miami.
Asimismo fue enterrado el viernes 14 de diciembre en la Basílica de Suyapa de Tegucigalpa, siendo acompañado de sus familiares y amigos. El Plantel del Olimpia se presentó a dar el último adiós al señor Ferrari.
Por su parte su Hija Giannina Ferrari hablo sobre el momento que pasa ella junto a su familia tras un grande dolor que ha conmovido a la población hondureña.
“Ustedes conocieron al Ferrari de Olimpia, de La Teletón y de los medios de comunicación. Yo conocí al padre amoroso; que me dejó la semilla del dar en mi corazón, dar sin ver a quien. Siempre nos repetía esa frase”, inicio diciendo Giannina.
Ferrari, más que un empresario
“Recuerdo que cuando era niña, a casa llegaba una persona de escasos recursos y mi padre siempre nos enseñaba a compartir lo que teníamos con ella. En otra ocasión se le acercó un hombre que padecía de diabetes; y desde ese momento se encargó de comprarle medicamentos”.
Y agregó: “Lo material se termina, para dar no solo se ocupa dinero, se necesita cariño, ternura y mi papá tenía todo eso, todos podemos dar cuando queremos, me enseñó que dar nos dignifica, invito a los empresarios a que sean generosos como mi papá y busquen el bien de los demás”.
¿Qué es lo que nunca logro Rafael Ferrari?
“Mi padre dejó pendiente un sueño, de niña me contaba que su sueño era que, en cada pueblo de Honduras, hubiese un hospital y una escuela, para lograrlo debemos unirnos todos, que desaparezcan el odio, la división y cualquier tipo de sentimientos dañinos, Jesús vino por mi padre para llevárselo con él”, finalizo la hija del empresario hondureño.
