Tegucigalpa, Honduras.- De los 12,000 centros educativos en deterioro contemplados en el Decreto Ejecutivo No. PCM 34-2023, el gobierno afirma haber reparado 5,500 hasta ahora, y tiene en su agenda la reparación de unos 6,000 para finales de 2025, con la promesa de cumplir la meta establecida inicialmente.
En el 2023, el gobierno emitió el PCM que contiene el Reglamento del Decreto Ejecutivo PCM 34-2023 del convenio marco de cooperación interinstitucional entre la presidencia y la Asociación de Municipios de Honduras (Amhon), para la reparación y reconstrucción de por lo menos 12 mil centros educativos (el 58 % de las escuelas en el país). En el PCM se estableció que la Secretaría de Finanzas (Sefin) cada año debe identificar los recursos dentro del Presupuesto General de Ingresos y Egresos, por un monto de 2 mil millones de lempiras.
Desde entonces hasta la fecha, las autoridades educativas afirman contabilizar alrededor de 5,500 centros educativos intervenidos; sin embargo, Diario TIEMPO solicitó dicha información a la Secretaría de Educación, pero no fue facilitada.
De acuerdo con el viceministro de Educación, Edwin Hernández, durante el 2024 intervinieron unos 1,590 centros educativos. Entre estos, 52 Centros de Educación Básica recibieron acondicionamiento de sus aulas bioclimáticas.
Además, aseguran que hicieron la entrega de 12,589 pupitres, 430 pizarras y material fungible en 1,244 centros de educación prebásica. La labor de reconstrucción se ha realizado con fondos nacionales y, para este 2025, están a la espera de la cooperación de la República Popular China.
Para 2025
En ese sentido, el ministro de Educación, Daniel Sponda, afirmó que para este 2025 tienen la meta de alcanzar y superar los 6,000 centros educativos intervenidos.
“Cuando llegamos al gobierno, la presidenta (Xiomara Castro) estableció en su campaña que íbamos a reparar al menos la mitad de los centros educativos, lo que representaba un número de 12,000. Hemos intervenido unos 5,500 centros educativos, y este año, de aprobarse el presupuesto, vamos a alcanzar la meta que se propuso”, afirmó.
Sponda añadió que han ejecutado alrededor de 400 mil millones de lempiras en la reparación de centros educativos. De acuerdo con el dictamen del presupuesto socializado en el Congreso Nacional —actualmente estancado— para este año se establecen 498 millones 595 mil 265 lempiras destinados única y exclusivamente a la ejecución de proyectos de reconstrucción, mantenimiento y reparación de la infraestructura escolar en los 298 municipios.
Es importante resaltar que Shin Fujiyama, el influencer japonés, ha construido unas 70 escuelas en Honduras y tiene alrededor de dos más en proceso de construcción. El filántropo tiene la meta de construir 1,000 escuelas en el país.
No obstante, su labor se ha visto envuelta en polémica debido a que han colocado placas gubernamentales de inauguración en algunas de sus obras.
Lejos
El director de educación de la Asociación para una Sociedad más Justa (ASJ), Marlon Escoto, señaló que se necesita una inversión de unos 76 mil millones de lempiras para intervenir toda la infraestructura del sistema educativo.
“Hay que reconocer que estos tres años la inversión ha sido significativa. Frente a la necesidad e inversión total, es grande la brecha. Se requieren unos 3 mil millones de dólares para toda la infraestructura”, dijo. A la vez, Escoto apuntó que trasladar los fondos a las municipalidades es una herramienta que debe mantenerse para erradicar la problemática.
Mencionó que “los grandes desafíos siguen siendo la creación del Instituto de Infraestructura que está en la Ley Fundamental. Eso le daría estabilidad, sabrían cuántos centros tienen, cuántos recursos disponen, tener cartera de negociación. Y no hacer intervenciones con influencias político-partidarias porque no se estaría cerrando la brecha. No se ha invertido en mantenimiento; hay muchos centros que en menos de un año se ven deteriorados”, apuntó.
El titular de educación de ASJ señaló que las zonas rurales de Olancho, Gracias a Dios y las zonas suburbanas de las ciudades como Tegucigalpa y San Pedro Sula tienen la mayoría de centros educativos en mal estado. Sostuvo que la Cooperación Alemana ha estado reconstruyendo centros educativos en zonas rurales por más de 14 años y se ha extendido en diferentes departamentos.
“Hemos escuchado cifras diferentes entre el Fondo Hondureño de Inversión Social y Educación. Nos gustaría que la cifra real sea la mayor. Este último año tendremos la posibilidad de acceder a los sistemas de información al cierre del 2024 y hacer una valoración más cercana, primero porque la información de los primeros tres años debe estar disponible”, cerró.
Influenciado por la política
Gilberto Benítez, dirigente magisterial de San Pedro Sula y exdirector departamental, reconoció el esfuerzo por la infraestructura de los centros educativos, pero lamentó que se elijan qué escuelas reparar mediante el color político.
“El gobierno ha hecho un esfuerzo por reconstrucciones escolares, unas con fondos externos y otras nacionales, pero ha tenido que ver bastante la política. Si el alcalde, un recomendado del patronato o un diputado es del partido del poder, ahí van a construir. Aquí en el área urbana han quedado a medias, eso da a conocer que no se ha hecho de forma equitativa, no se ha despolitizado”, manifestó.
Agregó que “en el centro de SPS hay centros educativos en precarias condiciones y no digamos en el área del Merendón. Hay que tener cuidado para que la educación no se politice, porque son niños y jóvenes que están estudiando y no tienen nada que ver con política”.
Benítez expuso que los centros educativos en mal estado en la ciudad industrial son el Instituto Modesto Rodas Alvarado, el CEB Kennedy número uno y el Centro de Educación Básica Presentación Centeno. Así como los que están ubicados en el Merendón y en la franja del río Coco y Segovia.
“Los problemas son de energía eléctrica, cortocircuitos; cuando viene la temporada de calor, los servicios sanitarios y agua potable (se ven afectados). La mayoría de los centros no están en condiciones óptimas. También hay bastantes problemas de aguas negras”, cerró.
Lo mínimo
El experto en temas educativos, Dennis Cáceres, señaló que un centro educativo en buen estado equivale a las condiciones mínimas para que pueda desarrollarse la preparación de los niños y jóvenes hondureños.
“El tema de infraestructura es un tema que tiene que seguir avanzando, aunque no justifica el rendimiento. Son condiciones mínimas donde el profesor y estudiante se reúnen para que se dé el proceso de aprendizaje. Lo que no podemos certificar es que sea el número de centros que hayan reparado. Cuando este gobierno tomó la infraestructura, más del 70 % estaba dañada. Eso no es posible reparar en un solo gobierno”, dijo.
Cáceres razonó que para reparar los 12 mil centros necesitarían alrededor de 60 mil millones de lempiras, y tomaría entre 12 y 20 años. Además, señaló que “nadie va a negar que no se puede dar el proceso de enseñanza en un centro educativo que prácticamente no existe. La infraestructura es la primera condición mínima”, manifestó.
“Una mejor infraestructura atrae a los estudiantes. Entre mejor está, los padres de familia van a elegir su centro. Nadie quiere ir a uno que no tiene techo, paredes y pupitres. (Esta problemática) tiene un cierto aporte a la deserción escolar, aunque está más influida por la pobreza de su familia y la migración”, concluyó.