SAN PEDRO SULA. Dos cadáveres fueron encontrados la mañana de este jueves en la Aldea La Pedroza, sector Ticamaya, zona norte de Honduras.
Se supo que ambos cuerpos embolsados estaban dentro de un barril de color azul y se dijo que les dieron muerte con arma blanca, así como también se dio a conocer que uno de ellos tenía un tatuajes en el extremo izquierdo de su hombro.
A ninguno de los hombres asesinados se les encontró identidades, pero se presume que sus edades oscilan entre los 35 a 40 años de edad.
Al lugar del hallazgo ya se hizo presente la Policía para acordona la dantesca escena e indagar en lo ocurrido. Posteriormente, se desplazó un equipo de Medicina Forense del Ministerio Público (MP) para levantar ambos cadáveres.
Noticia en desarrollo
ANTECEDENTES
El pasado 5 de julio, dos personas de sexo masculino fueron encontrados muertos en horas de la mañana en el sector Ticamaya, zona norte de Honduras.
Las víctimas fueron identificadas como Gerson Eduardo Vives de 22 años de edad y Juan Sánchez Ríos, de 25 años de edad, residentes en la Aldea El Ocotillo y quienes fueron hallados entre bolsas negras y tatuajes en sus cuerpos. Al lugar del hallazgo ya se hizo presente la Policía para acordonar la escena. Además, para indagar en quiénes les dieron muerte y del motivo del hecho. Asimismo, se desplazó posteriormente Medicina Forense del Ministerio Público (MP) para levantar ambos cuerpos. Así como para trasladarlos a la morgue sampedrana, donde se espera los parientes puedan reclamarlos.
En septiembre de 2013, como dos hermanos que iban en busca de empleo a una maquila fueron identificados los cadáveres de un hombre y una mujer. Quienes fueron hallados en un lugar conocido como Prado 1, en Ticamaya.
Familiares de las víctimas se presentaron a la morgue de Medicina Forense. Esto, luego de enterarse del hallazgo de los cuerpos a través de los medios de comunicación.
Las víctimas fueron identificadas como Walquiria Flores Pineda, de 20 años de edad y Edwin Flores Pineda, de 16 años de edad; residentes en Dos Caminos, siempre en la región norte del país.
Los dolientes desconocían por qué los hermanos fueron sido ultimados. Pues aseguraron que eran muchachos humildes, miembros de una familia de 22 hermanos.
Sin pistas del doble crimen, autoridades policiales del sector indicaron que las investigaciones preliminares indicaban que varios sujetos que iban en una camioneta Champagne fueron quienes ultimaron a las víctimas.
CADÁVERES EN TICAMAYA
En la escena del crimen, agentes de inspecciones oculares de la Dirección Nacional de Investigación Criminal hallaron varios casquillos de bala calibre nueve milímetros.
Las víctimas fallecieron de laceración cerebral producida por las balas. Ambos cuerpos fueron retirados de la morgue por sus familiares.
