Hace menos de un mes, el secretario de Defensa de Estados Unidos, James Mattis, anunció que retrasaba la decisión sobre el reclutamiento de transexuales seis meses; al menos hasta enero de 2018.
Un tiempo adicional, señalaba en un memorándum, para evaluar cuidadosamente «el impacto de estas adhesiones en la disposición y letalidad» de las fuerzas armadas.
La evaluación, sin embargo, ha sido más rápida de lo esperado. El presidente Donald Trump anunció esta mañana a través de Twitter que el «gobierno de EE.UU no aceptará o permitirá a individuos transexuales servir en ningún puesto en el ejército».
En tres tuits -con un tono más calmado que en otras ocasiones-, señalaba que esa decisión era fruto de la consulta con sus «generales y expertos militares».
El presidente subrayó: «Nuestro ejército debe estar centrado en una victoria decisiva y abrumadora y no se le puede cargar con los costes médicos y la perturbación que implicaría los transexuales en el ejército».
After consultation with my Generals and military experts, please be advised that the United States Government will not accept or allow……
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) July 26, 2017
De esta forma, Trump cierra la puerta a un colectivo que había empezado a incorporarse públicamente a filas en junio de 2016 durante la Administración Obama.
En aquel momento, con Ash Carter como máximo responsable de Defensa, se anunció una nueva política que ponía fin a la prohibición imperante, que negaba el acceso de los transexuales al ejército.
….Transgender individuals to serve in any capacity in the U.S. Military. Our military must be focused on decisive and overwhelming…..
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) July 26, 2017
….victory and cannot be burdened with the tremendous medical costs and disruption that transgender in the military would entail. Thank you
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) July 26, 2017
«Tenemos transexuales sirviendo de uniforme y tenemos una responsabilidad con ellos», decía hace poco más de un año Carter al iniciar ese periodo transicional hasta la completa normalización del acceso para esta colectivo. El Centro Nacional para la Igualdad de los Transexuales estima que en torno a 15.000 sirven en las Fuerzas Armadas de EEUU actualmente. Tras el anuncio de Trump, la organización se mostró muy crítica con la decisión.
«Esto es peor que ‘Don’t ask don’t tell [no preguntar no decir]», señaló en un comunicado en referencia a la política aprobada en 1994 que prohibía la discriminación y el acoso a los homosexuales y bisexuales en el ejército siempre que no reconocieran abiertamente su orientación sexual.
Fundado en 2003 para defender los derechos del colectivo transexual, el Centro Nacional para la Igualdad de los Transexuales calificó el anuncio de Trump como un «ataque atroz a nuestros miembros en servicio» detrás del que no había más que «intolerancia». También lamentó que el presidente quiera «descartar a miles de soldados entrenados y cualificados que ya están sirviendo honorablemente y no han hecho otra cosa más que ser honestos sobre quiénes son ellos».
Cabe recordar que en junio de 2016, tras el atentado yihadista contra la discoteca gay Pulse de Orlando, Trump aseguró a la comunidad LGTB que él «era un verdadero amigo» para ellos.El Pentágono ha señalado que «trabajará codo con codo con la Casa Blanca para hacer efectiva la decisión del comandante en jefe».
