AFP. Kamala Harris hace campaña este jueves con Barack Obama y el roquero Bruce Springsteen, en Georgia, tras llamar «fascista» a su rival Donald Trump, quien ha comparado la Unión Europea con «una mini China» a nivel comercial.
La vicepresidenta demócrata lo apostó todo a una carta. Lo que está en juego en las elecciones presidenciales del 5 de noviembre. Según ella, es la defensa de la democracia frente a su rival, Donald Trump, a quien considera «cada vez más desquiciado» e interesado en un «poder sin control».
No lo tiene fácil. Sigue empatada en los sondeos con él, dentro de los márgenes de error, en particular dentro de los siete estados clave que podrían decidir el resultado.
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Harris estará por primera vez en el escenario con el expresidente Barack Obama, quien ya ha sudado la camiseta en solitario durante los últimos días para que ella se convierta en la primera mujer al frente del país.
Les acompañará el roquero Bruce Springsteen, apodado «El Jefe», cuyos himnos a la lucha de la clase trabajadora lo han convertido en uno de los artistas más populares del país.
El martes la exfiscal pronunciará «un alegato final» contra Trump en Washington, en el lugar donde el expresidente aregó a sus simpatizantes antes de que atacaran el Capitolio el 6 de enero de 2021, en un intento por evitar certificar la victoria de Biden.
Mitin en Arizona
Arizona, en el suroeste del país, es uno de los siete decisivos junto con Georgia, Carolina del Norte, Pensilvania, Michigan, Wisconsin y Nevada.
Trump dará un mitin para hablar de la crisis de la vivienda candidato, y después irá a Las Vegas para dirigirse a los jóvenes ultraconservadores. Rara vez se ciñe a los temas y, en cualquier caso, siempre habla de lo que considera prioritario: la migración ilegal.
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En una entrevista radiofónica, el magnate comparó este jueves a la UE con una «mini China» en materia comercial. «No toman nuestros coches, no toman nuestros productos agrícolas, no toman nada», se quejó. «La UE es una mini China, pero no tan mini», añadió.