Don Francisco revela cómo el pasado 19 de septiembre, Mario Kreutzberger, se despidió de su programa Sábado Gigante. El último programa en el que desarrolló una cita sabatina obligatoria con todos los ciudadanos latinoamericanos. Con sinceridad reveló cómo se desarrolló su faena antes de entrar a despedir de las pantallas el programa que le diría adiós a los sábados. En una entrevista exclusiva a The New York Times, Kreutzberger relató como vivió las horas previas al último show. En el texto, traducido por Infobae, relató que en esa ocasión entró al estudio por una puerta diferente y que, al iniciar la tramisión se sentía destruido.
A CONTINUACIÓN EL TEXTO COMPLETO:
No pude dormir la noche del viernes. Ni un minuto. Tuve una emergencia dental. Sentía un enorme dolor en la boca durante la noche. Fui al médico a las 8 de la mañana. Todo estaba cerrado porque era sábado, pero me envió a un especialista. Y yo le dije al especialista: “Tengo que terminar mi programa después de 53 años. ¿Qué puedes hacer por mi?”
Llegué al estudio con mi mejilla hinchada, muy hinchada. Y llamé al médico hacia atrás y dije: “¿Qué puedo hacer yo?” Y él dijo: “Bueno, usted tiene que hacer como las abuelas. Hervir agua con sal para el interior de su boca, y para el exterior, poner hielo.
A las 13.00, tuvimos una pequeña fiesta con champán para todos los que trabajan en el programa – unas 50 o 60 personas. Nos dimos todos una medalla de oro – en un lado estaba el logo de la serie, y en el otro lado el nombre de la persona.
A las 15:00, nos encontramos y ensayamos el show de dos horas. Y luego me fui al camerino.Me pusieron mi traje. Ese saco, los calcetines, el cinturón y el pantalón, los zapatos – todo lo que nunca utilizaré de nuevo. Nunca jamás.
19:45 estaba dentro del estudio. El director de nuestra orquesta, que ha sido nuestro director durante 47 años, se fracturó la mano derecha aquí en Miami. Tuvo un accidente tres días antes. Pero me dijo que quería tocar el piano conmigo y que lo haría sólo con la mano izquierda. Y así lo hizo. Fue un momento muy emotivo para mí.
Tengo una rutina. Soy muy supersticioso. Siempre voy al estudio a través de la misma puerta. Y siempre dejo el estudio por la misma puerta. Esa noche, salí por una puerta diferente. Esa fue la primera vez que había pasado alguna vez por esa puerta.
Después, me subí a un autobús con toda mi tripulación. Manejó por los alrededores durante una media hora. Tomamos champagne y luego volvimos y tenía un cóctel. Salí de la fiesta alrededor de la 01:30 de la mañana. Cuando salí, el estudio estaba completamente destruido. No más estudio. Se llevaron todo.
Luego me fui a casa y hablé con mis nietos. Mi hija, mis dos hijos, mi ahijado, mi ahijada, mis nueve nietos, todos estaban de visita. Y hablé con ellos acerca de la importancia de estos 53 años para mí. Toda la familia fue construida alrededor de la serie. Siempre fui un bígamo. Estuve casado al mismo tiempo para mi esposa y para la televisión. Construimos nuestra familia durante esos años de televisión. Mi hijo mayor tiene ahora 52 años, mi hija 50; mi otro hijo 48.
Les dije a todos que la vida no termina con un espectáculo, que ahora, a partir del lunes, tengo que reinventarme. A ese momento ya era bastante tarde porque no había conseguido dormir la noche anterior. Y a las 04:00 de la mañana, nos fuimos a la cama.
Periodico Venezolano
