Redacción. Una situación alarmante reporta el Centro Hondureño para el Niño Quemado (Cehniq), ya que, a pesar de que aún no llegan las fiestas de Navidad, se han atendido 10 menores con lesiones a causa de la pólvora.
La pólvora es un elemento altamente explosivo que, al tener contacto con el fuego, genera una intensa reacción y, al estar cerca del cuerpo humano, puede producir lesiones tan graves que incluso pueden llevar a una amputación.
El paciente número 10 ingresó el pasado lunes al Cehniq, procedente de Santa Bárbara. Debido a la gravedad del caso, el traslado se realizó en una aeronave de la Fuerza Aérea Hondureña (FAH).

De primera instancia, al menor de 3 años lo llevaron al Hospital de Occidente, en Santa Rosa de Copán, pero la magnitud de las lesiones requería atención especializada. Presenta quemaduras de segundo y tercer grado en el 43 % de su cuerpo.
Al llegar a Tegucigalpa fue trasladado en una ambulancia hasta el hospital para niños quemados, donde lo recibió personal especializado y se inició la atención que su caso exige.
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¿Cómo se quemó?
Alfredo Ortiz, portavoz del Cehniq, informó a Diario Tiempo que el hecho en el que resultó quemado este niño ocurrió en su casa de habitación, en el sector de El Naranjito, Santa Bárbara.
«En la casa estaban el niño de tres años, otro menor y la mamá que se dedica a la fabricación de pólvora como actividad para ganar dinero. Sin embrago, hubo una especie de contacto, por lo que no se explican cómo se encendieron los cuetes, explotaron y destruyó la vivienda. La mamá trató de sacar a los dos niños, pero fue tardío para este menor de 3″, relató Ortiz.
Agregó que el producto lo elaboraban y luego lo almacenaban en la casa sin ningún tipo de medidas de seguridad para evitar una tragedia.

El pequeño sufrió quemaduras de segundo y tercer grado en el rostro, cabeza, brazos, manos, antebrazos, abdomen, muslos, genitales y piernas.
Estadísticas que llaman la atención de los padres y adultos
En este contexto, Ortiz recalcó que la situación es alarmante, porque aún faltan varios meses para las fiestas de Navidad y Año Nuevo, pero siguen ingresando niños quemados por pólvora al Cehniq.
Estos 10 casos comenzaron a contabilizarse desde marzo. La mayoría proviene de Santa Bárbara, Copán y Lempira, en la zona occidental de Honduras, donde se elabora pólvora en las viviendas.
Los menores afectados tienen entre 3 y 12 años. No obstante, también se han registrado ingresos de adolescentes de 14 a 16 años, es decir, más grandes y conscientes.

«En la mayoría de los casos, presentan daños (quemaduras) en rostro, tórax, abdomen y brazos. Las lesiones varían de segundo a cuarto grado, y en el peor de los casos sufren mutilaciones», acotó Ortiz.
Las principales causas de quemaduras en niños en Honduras son:
- Líquidos calientes
- Flama
- Contacto
- Electricidad
- Pólvora
La sala de hospitalización del Cehniq, hasta este 19 de agosto, cuenta con 11 pacientes, lo que representa un 91 % de ocupación. De ellos, 5 permanecen en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI).