REDACCIÓN. Un hondureño identificado como Ángel fue detenido ayer, miércoles en New Orleans, Estados Unidos, cuando se dirigía a una intervención médica crucial para tratar las graves lesiones que sufrió en un accidente laboral hace aproximadamente un año. La familia de Ángel está profundamente preocupada por su bienestar, ya que su estado de salud es delicado y la falta de atención médica podría poner en riesgo su vida.
Ángel sufrió una caída durante su trabajo, que le provocó fracturas en ambas piernas. Desde entonces, ha estado en un proceso médico para tratar de reconstruir una pierna que quedó severamente dañada. Sin embargo, la situación es crítica: tiene una herida abierta con signos de infección, agujeros en la pierna y problemas respiratorios y de presión arterial que han deteriorado notablemente su salud. La familia teme que, si no recibe atención inmediata, Ángel pueda perder la pierna o incluso su vida.
Según relata Jocelyn, hija de Ángel, por la mañana del miércoles, alrededor de las 7:00 a.m., cuando su padre se disponía a asistir a una cita médica importante para continuar su tratamiento. Lo rodearon aproximadamente 20 patrullas de migración y lo detuvieron en el primer semáforo a solo tres minutos de salir de su casa. La familia asegura que Ángel no fue advertido ni tuvo oportunidad de recibir la atención médica que requiere.
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Jocelyn enfatiza el impacto devastador que ha tenido el accidente en la vida de toda su familia. Hace un llamado urgente a las autoridades para que brinden apoyo legal y humanitario a Ángel. Buscan que él pueda continuar con su tratamiento médico y recuperar su salud. La familia ha presentado pruebas que incluyen fotografías, vídeos y documentos médicos que evidencian la gravedad del estado físico de Ángel y la importancia de que se le permita acceder a los cuidados necesarios.
“Mi papá es un hombre excelente y su situación es muy grave. No hemos recibido la ayuda necesaria y tememos por su vida. Necesitamos que este caso tenga visibilidad y que alguien pueda ayudarnos,” expresó Jocelyn con preocupación.
La familia solicita ayuda legal para evitar la deportación y garantizar que Ángel reciba la atención médica adecuada para salvar su pierna y su vida.
