REDACCIÓN. Este domingo, el Cuerpo de Bomberos confirmó el hallazgo de un cuarto cadáver de los jóvenes raptados en El Progreso, Yoro, zona norte de Honduras.
Por lo tanto, el cuerpo hallado pertenece al muchacho César Alberto López de 15 años de edad. Al lugar llegaron elementos de la Policía para acordonar la escena. Asimismo, Medicina Forense del Ministerio Público para el respectivo levantamiento.
Información preliminar indica que los responsables de haberles quitado la vida sujetaron a tres de las víctimas a la rama de un árbol. Mientras que el cuarto cadáver apareció a unos metros de distancia.
AYER HALLARON LOS PRIMERO TRES
Dentro de sacos fueron hallados ayer, en una finca bananera, en el sitio conocido como La Rotonda del río Ulúa.
Al filo de las 5:00 de la tarde, la Policía fue alertada del hallazgo de los cadáveres que estaban flotando sobre el arroyo. Asimismo, se supo que los cuerpos estaban dentro de sacos con las manos y pies atados.
Según la información proporcionada por autoridades policiales, los restos eran de los jóvenes que el martes anterior fueron raptados cuando jugaban fútbol en un campo de la Aldea La Ochoa. Desde entonces, parientes de Edgardo Antonio Salinas de 19 años de edad, Cristian David Orellana de 19 años.
Además, de Alex Armando Vallejo de 19 años y César Alberto Cruz de 15 años, los anduvieron buscando en compañía de la Policía y el Cuerpo de Bomberos.
Los muchachos fueron raptados por sujetos que llegaron hasta el campo de fútbol y bajo intimidaciones los obligaron a marcharse con ellos.
En tanto, los restos fueron trasladados a la morgue de San Pedro Sula, donde se les está practicando la respectiva autopsia.
SÉPALO
Los infortunados jóvenes trabajan cortando caña de azúcar y también realizaban otras actividades agrícolas. Así como en mototaxis que operan en la zona, según sus parientes.
Ellos residían en la aldea Las Minas, ubicada a 15 kilómetros de donde desaparecieron.
El día que fueron llevados por la fuerza sus familiares encontraron varios pedazos de madera con rasgos de sangre. Por lo que sospechaban lo peor y ayer descubrieron la terrible verdad de lo que sucedió con los jóvenes.
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