Redacción. Un joven hondureño que recientemente había regresado al país murió a balazos la tarde del miércoles en una zona rural de Siguatepeque, Comayagua.
La víctima fue identificada como Rudy Noel Santos López, de 25 años, quien residía junto a su familia desde su retorno a Honduras en julio.
De acuerdo con el informe policial, sujetos armados lo interceptaron cuando se desplazaba cerca de su comunidad natal y, sin mediar palabra, le dispararon varias veces. Santos López había salido ese día a buscar a otros familiares, pero nunca llegó a su destino.

Reconocido por su familia un día después
Tras el levantamiento del cuerpo por parte del Ministerio Público y la Policía Nacional, el cadáver pasó a la morgue capitalina como persona desconocida, ya que no portaba documentos de identificación. El jueves 7 de agosto sus familiares acudieron al centro forense y lograron identificarlo.
Según relataron, Rudy no había tramitado su Documento Nacional de Identificación (DNI) debido a que recientemente lo habían deportado desde Estados Unidos, luego de una detención por parte del Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés).

“Nosotros no sabemos por qué lo mataron. Nos enteramos por las noticias, nadie nos avisó. No tenía ni un mes de haber regresado a Honduras”, expresó una pariente visiblemente afectada, quien pidió reserva de su identidad.
Investigaciones en curso
La Dirección Policial de Investigaciones (DPI) se desplazó al lugar del crimen para recolectar evidencias que permitan esclarecer las circunstancias y dar con los responsables. Las autoridades de la Cancillería aún no han confirmado oficialmente los detalles de su retorno, ni si existía una orden pendiente en su contra.
Este hecho se suma a la lista de muertes violentas que afectan a comunidades hondureñas, dejando en luto a otra familia que, apenas semanas atrás, había recibido de vuelta a uno de sus miembros tras su estancia en el extranjero.