TEGUCIGALPA, HONDURAS. El apoderado legal del exdirector del Instituto Hondureño de Seguridad Social (IHSS), Mario Zelaya, Francisco Pascua, aseguró que la vida de su defendido podría estar en peligro tras su traslado a la cárcel de Támara.
El funcionario se encuentra cumpliendo una condena de 18 años de cárcel por cargos de lavado de activos, fraude y violación de deberes.
El jurista expresó su postura en el medio de comunicación El Informativo de HRN.
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«Existe una evidente preocupación manifiesta tanto de nosotros como apoderados legales, de los mismos privados de libertad y sus familiares. Coincidimos en algunos puntos de convergencia, como el hecho de que todos somos iguales ante la ley y nadie merece beneficios», expresó.
Del mismo modo, el profesional del derecho comentó que tratados internacionales no permiten que los reclusos estén mezclados con maras y pandillas.
«No obstante, al ser privados de libertad de alto interés porque han sido sindicados en casos de alto impacto, pues ya los mismos tratados internacionales y las mismas convenciones de las cuales Honduras es signatario, le dicen a usted que no pueden estar mezclados con delincuentes comunes y mucho menos pertenecientes a maras y pandillas», comentó.
Episodios de violencia
En tal sentido, Pascua destacó la historia reciente del sistema penitenciario hondureño.
«Recibimos ese traslado de manera intimidante», señaló el abogado, insinuando que podría haber un intento de coaccionar a Zelaya, para que no colabore con la justicia en futuras investigaciones, como la llegada de la CICIH (Comisión Internacional Contra la Impunidad en Honduras).
Además, destacó que las condiciones de reclusión de Mario Zelaya y los otros 19 privados de libertad trasladados son degradantes. Así mismo, no cumplen con los requisitos mínimos que deberían garantizarse a los reclusos.