Redacción. Sandra Reyes, reconocida actriz que dejó una huella imborrable en la televisión colombiana, falleció este domingo 1 de diciembre de 2024. La noticia conmocionó tanto a sus seguidores como a quienes admiraron su trabajo en exitosas producciones como Pedro, el escamoso y la serie biográfica Rigo, basada en la vida del exciclista antioqueño Rigoberto Urán.
La actriz bogotana, de 49 años, murió a causa de un cáncer de seno que enfrentaba desde hace tiempo, según se confirmó. Sandra falleció en su hogar, rodeada de sus seres queridos, quienes estuvieron con ella durante sus últimos días. «Ella enfrentó esta etapa con valentía y dignidad, siempre rodeada del amor de su familia y amigos cercanos2, declaró Nicolás a Noticias Caracol.
El agravamiento de su enfermedad marcó los últimos meses de vida de la actriz, quien había decidido mantener su diagnóstico en privado para evitar el enfoque mediático en su salud. La familia también informó que los funerales serán íntimos, respetando el carácter reservado que siempre caracterizó a la actriz.
La muerte de Sandra Reyes deja un vacío y sirve como recordatorio de la importancia de la detección temprana del cáncer de seno. Sus seres queridos han invitado a las mujeres a realizarse el autoexamen y a asistir a controles médicos periódicos para cuidar su salud.
La enfermedad que se llevó a Sandra Reyes
La famosa actriz padeció los últimos meses por causa del cáncer de seno. Esta es una enfermedad de las enfermedades que afectan en mayor medida a las mujeres, por lo que es necesario que se realicen una mamografía. Hay que tener en cuenta que esta es una de las herramientas cruciales para detectar este tipo de anomalías que, de no tratarse a tiempo, pueden llegar a ser mortales.
Este examen permite identificar tumores que son demasiado pequeños para ser palpados, según información revelada por el Instituto Nacional de Cáncer de Estados Unidos.
Este procedimiento genera imágenes del interior de la mama, facilitando la detección temprana de tumores y es esencial en la identificación de cambios en el tejido mamario que podrían indicar la presencia de cáncer, incluso antes de que se manifiesten síntomas físicos evidentes.
Cabe mencionar que los exámenes de mamografías se han convertido en una práctica común en la medicina preventiva, especialmente en mujeres mayores de 40 años, debido a que son más propensas a desarrollar el cáncer de mama.