Redacción. Tras un mes marcado por el estrés, los excesos y la falta de sueño, los especialistas en cuidado de la piel coinciden en que enero es el momento ideal para reparar la piel, devolverle la vitalidad y combatir los signos de fatiga, como la deshidratación y la flacidez.
Para potenciar los resultados a corto plazo, la tecnología de vanguardia ofrece protocolos de alta eficacia.
«Diciembre es un mes de estrés, falta de sueño y excesos que acaban pasando factura en la piel, pidiendo nuestra rutina de belleza una vuelta a la normalidad. Además, la piel se vuelve más sensible y el frío de enero empeora aún más estos factores», explica Aura Serras, directora de una clínica estética, quien sugiere complementar la limpieza profunda e hidratación con tratamientos intensivos.
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Facial ‘Fire & Ice’
Uno de los tratamientos que destaca por su rapidez y resultados visibles es el facial Fire & Ice. Este protocolo, apto para todas las edades y tipos de piel, promete una piel uniforme, lisa y luminosa al instante, sin requerir tiempo de inactividad.
Serras explica que «el secreto de este facial es la combinación de diferentes sérums y mascarillas terapéuticas y reparadoras de la piel. Es un tratamiento intensivo, excelente para todo tipo de pieles y edades, inmediato, sin tiempo de inactividad u otros factores secundarios negativos».
Su objetivo es restaurar la superficie de la piel de forma segura, reducir la aparición de líneas finas y arrugas, y estimular el rejuvenecimiento general. Con sesiones que varían entre 30 y 90 minutos, es el tratamiento flash perfecto para una revitalización inmediata.
Láser de picosegundos
En el campo de la dermatología, el láser de picosegundos representa una tecnología de última generación. Este sistema emite pulsos de luz ultracortos, medidos en picosegundos, que generan un efecto fotomecánico que actúa sobre los problemas específicos sin dañar los tejidos circundantes.
El Dr. Ricart destaca la versatilidad de esta herramienta, que es ideal para:
- Lesiones pigmentarias: el láser fragmenta depósitos de melanina, siendo altamente efectivo contra manchas oscuras como el melasma o los léntigos.
- Lesiones vasculares: la hemoglobina absorbe la energía del láser, logrando la coagulación y destrucción de los vasos sanguíneos no deseados.
- Rejuvenecimiento: «el calor generado por el láser, estimula la producción de colágeno en las capas más profundas mejorando la textura, firmeza y elasticidad», indica el Dr. Ricart.
