Redacción. El maquillaje gótico da un giro inesperado y sutil con la llegada del soft goth, una versión mucho más elegante y llevadera de la estética oscura.
A diferencia del estilo gótico tradicional, cargado de dramatismo con piel pálida y delineados intensos, el soft goth conserva su esencia misteriosa, pero la suaviza con difuminados delicados y un toque romántico que lo hace ideal tanto para el día como para la noche.
Esta estética encuentra el equilibrio perfecto entre lo oscuro y lo chic. La clave está en los ojos, que se visten con tonalidades profundas como negro, burgundy, ciruela o gris, aplicadas siempre con un efecto ahumado bien difuminado. El delineado se aleja de la perfección y se prefiere un cat eye delicado o un efecto ligeramente corrido.
Le puede interesar – Disfrute sin miedo: cómo cuidar la piel durante la Semana Morazánica
En cuanto a los labios, el soft goth juega con los extremos: o se opta por tonos muy oscuros como vino, marrón o ciruela para acentuar el misterio, o se eligen nudes apagados y neutros para equilibrar una mirada intensa. Las cejas, ya sean gruesas y laminadas o delgadas y bien definidas, se adaptan al gusto personal.

Influencia Y2K
El auge del soft goth makeup es un claro recordatorio de cómo las décadas de los 90 y 2000 siguen marcando la pauta. Esta tendencia toma referencias de la moda emo, el grunge y personajes icónicos como Lydia Deetz y Wednesday Addams. Sin embargo, se refina con un toque moderno y estilizado.
Figuras de la cultura pop actual han adoptado este look en pasarelas y alfombras rojas. Eso demuestra que el gótico puede ser tan sofisticado como cualquier estilo minimalista, fusionando ambas ideas. Su mayor encanto radica en su versatilidad: es un look edgy que no resulta excesivo. De igual manera, se adapta tanto a atuendos minimalistas como a looks de inspiración punk. Oscuro, elegante y enigmático, el soft goth makeup promete ser el aliado perfecto para destacar con sofisticación este 2026.



