REDACCIÓN. Un 26 de febrero de 1962 nació un gran artista hondureño que con solamente su guitarra, voz y gran talento, logró cautivar y enorgullecer a todos los compatriotas. Se trata de Guillermo Anderson, quien ha marcado un antes y un después en la música catracha. Él murió por un cáncer de tiroides, pero sus letras siguen marcando corazones.
El cantautor nació en Potreritos, barrio de La Ceiba, en la costa norte de Honduras. Esta ciudad bañada por el mar Caribe sería el centro creativo más importante para Guillermo.
De pequeño escuchó por primera vez los tambores garífunas (grupo étnico radicado en La Ceiba y alrededores), y desde ese momento nunca más lo abandonaron. Los ritmos garífunas como la «parranda o la «punta» son parte esencial de su música y representan su amor por el mar y todo lo relacionado a él.
Su música le canta, sobre todo, al amor y a la alegría de haber nacido en esta parte del mundo. Sus letras exaltan mucho las bellezas naturales de Honduras: sus ríos, sus mares, sus montañas, sus animales. También compuso canciones que abordan problemas sociales, como la pobreza y desigualdad. Servir a la comunidad fue otro de sus propósitos
Entre sus canciones más conocidas tenemos están: «El encarguito», «El tesoro que tenés», «Todo está aquí», «En mi país», «Pobre marinero», «Cuando llega el carnaval», «Así te quiero», «Misquita linda».
En el día de su funeral las escuelas de La Ceiba hicieron valla por todo el camino que haría el ataúd del cantautor, desde la Iglesia Catedral hasta el cementerio. Hubo largas filas de estudiantes rindiéndole homenaje.
Para recordar al gran artista catracho, recopilamos 8 datos de interés que probablemente no conocías de Guillermo:
Discografía
Anderson grabó 7 álbumes de estudio y 5 sencillos que resaltaron la cultura hondureña con emblemáticas canciones como ‘‘El encarguito’’, ‘‘En mi país’’, ‘‘Costa y calor’’, entre otras melodías.
Además de músico, también fue escritor
Una faceta que no muchos conocen del artista es que escribió algunos libros como ser “Del tiempo y el trópico” junto a Julio Escoto, un escritor hondureño. También escribió “Bordeando la costa”, un ejemplar que destaca un paseo por la costa del Caribe hondureño, entre otros.
Fue embajador de la cultura de Honduras ante el mundo
Su obra llegó a miles en el mundo debido a sus giras internacionales, gracias a ello fue nombrado como “Embajador cultural de Honduras ante el mundo por el pueblo y gobierno de Honduras”.
Algunos de sus reconocimientos
Por resaltar la cultura catracha recibió distinciones como “Premio Nacional de Arte” en 2003 por el Ministerio de Educación, “Premio Identidad Nacional 2005” otorgado por el Museo para la Identidad Nacional, ganó el “Premio Copán de Turismo” en 2003 por la Cámara Nacional de Turismo, y más.
Homenajes
Al conocerse la enfermedad que padecía Guillermo, países de América Latina, Europa y Honduras le dedicaron una serie de conciertos homenajeando al gran artista. También los desfiles patrios y la promoción educativa de 2016 fueron dedicados al reconocido cantante.
Sus giras internacionales
Sus piezas musicales sonaron en países como Estados Unidos, Brasil, Colombia, Venezuela, Ecuador, Argentina, Cuba y República Dominicana. En Europa tocó en Alemania, Francia, España, Italia, Austria, Inglaterra y Holanda. En Asia deleitó en Japón, Taiwán y Corea del Sur.
Sus trabajos por Honduras
El cantautor creó un disco sólo para subir el autoestima de las mujeres (Mujer Canción, Canción Mujer). Participó en múltiples campañas contra el «VIH» y presentó de manera pedagógica conceptos fundamentales de ecología y familiarizó a los niños con especies de la fauna tropical en su disco “Para los chiquitos”.
Legado
Anderson dejó una huella plasmada en Honduras, sobresalió con la pasión y determinación de cumplir cada meta, como persona puso en alto ante todo su país, su gente y consiguió ser un exitoso artista de Latinoamérica.