Redacción. La joven hondureña Daniela Bustillo, expareja de Luis Redondo, dio a conocer que acudió este viernes a la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) a interponer una demanda de manutención en contra del actual presidente del Congreso Nacional (CN) de Honduras.
A través de su cuenta de X, la joven posteó una fotografía en donde se le observa afuera de las instalaciones de la Corte en Estados Unidos (EEUU).
«En este momento me encuentro en la CIDH interponiendo las denuncias correspondientes en contra de Luis Redondo«, posteó la joven.
De momento se desconoce si la denuncia ante los DDHH procederá, puesto que este sería de las últimas instancias a tomar antes de iniciar un proceso a nivel local en contra de Redondo.
Deuda
Recientemente, la propia Daniela Bustillo denunció que Luis Redondo, actual titular del poder legislativo en Honduras, habría procreado una hija con ella.
No obstante, el político se habría desentendido de la alimentación y demás necesidades de la menor, por lo que Bustillo decidió denunciarlo en redes sociales.
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La hondureña compartió un documento con Diario Tiempo, que comprueba la deuda por manutención de casi 16,000 dólares (más de un cuarto de millón de lempiras, o el equivalente de una camioneta de lujo) que mantiene Redondo.
Además, mostró fotografías donde se ve a Redondo cargando a su hija en brazos, y comunicándose con ella a través de videollamadas. Inclusive, aparece en paseos junto a la bebé y de compras en un centro comercial de EEUU.
Según Daniela, el congresista bloqueó todo contacto para evitar recibir sus mensajes o los de sus padres. A su vez, relató que con engaños de Redondo fue enviada a Norteamérica a través de un «Coyote».
De igual menera, manifestó que ha tratado de comunicarse hasta con la madre de Redondo, pero no ha sido posible. Por ello, a través de Diario Tiempo, Daniela pidió que el congresista responda a sus obligaciones de padre.
Es así que el congresista ha preferido dejar a la menor en total abandono. Incluso, ha evitado referirse al tema a toda costa.