Redacción. Un video viral en redes sociales muestra a un pastor confesando a su congregación que viajó con su familia a Miami, Florida. Según él, recibió una revelación divina que le ordenó usar dinero del diezmo para cubrir los gastos del viaje.
La grabación generó debate entre internautas y sorpresa entre los feligreses. Algunos criticaron que el diezmo debe destinarse a los servicios y mantenimiento de la iglesia. Otros defendieron la acción, afirmando que “los siervos más fieles de Dios también reciben bendiciones”.
“El Señor (Dios) me habló claro y me dijo: ‘tú, tu esposa y tu niño necesitan un descanso’, y me mostró un crucero en Miami. Y que el diezmo y la ofrenda cubrirán los gastos”, declaró el pastor en el video.
Polémica
Aunque no se ha verificado completamente la autenticidad del material, el incidente reabrió el debate sobre la transparencia en la administración de fondos de las congregaciones.
No es la primera vez que líderes religiosos enfrentan acusaciones por mal uso de recursos. En 2014, el monseñor italiano Nunzio Scarano fue acusado de lavar millones de euros a través del Banco del Vaticano. Según las investigaciones, solicitó donaciones prometiendo destinarlas a un hogar para pacientes terminales, pero usó el dinero para pagar la hipoteca de su casa.
El diezmo sigue siendo un acto de fe y agradecimiento para muchos creyentes. Sin embargo, su administración continúa siendo un tema de discusión en distintos contextos religiosos.
En redes sociales, los comentarios sobre el caso van desde la burla hasta la preocupación por la falta de transparencia en algunas congregaciones. Muchos usuarios cuestionan cómo se utilizan los fondos recolectados a través del diezmo.

¿Qué es el diezmo?
El diezmo es una práctica religiosa que se remonta a tiempos antiguos y consiste en entregar el 10 % de los ingresos personales a la iglesia o comunidad de fe. Esta contribución busca apoyar la labor espiritual y el mantenimiento de los templos.
Su origen se encuentra en el Antiguo Testamento, donde se establecía como una forma de agradecer a Dios por las bendiciones recibidas. Además, servía para sostener a los sacerdotes y financiar actividades religiosas. En muchas tradiciones, el diezmo se considera una muestra de devoción, obediencia y compromiso con la comunidad de creyentes.
Hoy, la práctica continúa siendo común en diversas religiones, aunque su administración a veces genera debate sobre transparencia y uso adecuado de los fondos. Algunos fieles ven el diezmo como un acto de fe, mientras que otros exigen mayor rendición de cuentas por parte de las instituciones religiosas.
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