TEGUCIGALPA, HONDURAS. Para el criminalista Herman Vogelsan, la falta de oportunidades en el país estaría ligada como causa a los asesinatos múltiples.
La mayoría de estos crímenes en masa son contra menores y el experto vincula esta situación con la lucha de poder del crimen organizado.
El criminalista sostiene que cuando se procede a capturar y procesar a un delincuente, el lugar de éste es sustituido por otros jóvenes. Según Vogelsan, estos se sienten atraídos por grupos criminales debido a la situación económica.
Esto se refleja en falta de empleos y el alto costo de la canasta básica que azota a la mayoría.
“Atrayente” para los jóvenes
En consecuencia, estos aspectos se convierten en un “atrayente” para la juventud. Por ende, se interesan en formar parte de organizaciones delictivas.
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Asimismo, apuntó que en estos grupos existe competencia y por lo tanto no quieren perder su «reinado» criminal, agregó el criminalista.
Según lo detalló el experto, jóvenes entre 12 a 13 años tienen la necesidad de obtener dinero para salir a divertirse. Sin embargo, sus padres no pueden suplir el citado deseo, entonces es cuando buscan obtenerlo de forma ilícita.
Por lo tanto, formar parte del crimen organizado les ayuda a obtener fuertes cantidades de dinero a cambio de cometer actos delictivos.
Aumento de menores en pandillas
Por otro lado, Vogelsan señaló que en los últimos años ha incrementado el número de menores en maras y pandillas. Esto, porque los jóvenes no van a cárcel, sino a centros de rehabilitación.
Pero el experto no ve con buenos ojos estos centros. El considera que “no están funcionando para reinsertarlos, sino más bien son como escuelitas del crimen”.
Lo anterior, porque a su criterio ellos «entran como rateros y salen como profesionales del crimen”.
