TEGUCIGALPA, HONDURAS. Medicina Forense realizó una demostración televisada para que la población conozca cómo se realiza el proceso de sepelio para una persona fallecida por COVID-19 o por sospecha del virus.
La médico forense, Estelinda López, informó que el trato de cadáveres de este tipo lo debe realizar la Secretaría de Salud con el respectivo protocolo. No obstante, ellos siguen con este proceso si el reconocimiento lo hace Medicina Forense o las autoridades de Salud.
«El levantamiento de este tipo de cadáveres corresponden a la Secretaría de Salud». Asimismo, aseguró que el equipo encargado de realizar el entierro de los cuerpos de fallecidos por COVID-19 utilizan todas las medidas de bioseguridad.
López, explicó que esto «no es porque el cadáver en sí, transmita el virus, sino porque las regiones aledañas pueden estar infectadas».
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Protocolo para sepultar cuerpo de muertos por COVID-19
El proceso del protocolo para tratar los cuerpos de los fallecidos que luego se sepultarán, inició con la desinfección del área donde estaba el cuerpo sin vida. Esto, antes de pasar a introducirlos dentro de las bolsas impermeables.
El personal de medicina forense, mostró que luego de realizar la primera fase de fumigación, separan el cuerpo del exterior metiéndolo en una primera bolsa plástica identificada con los datos personales del fallecido.
Una vez terminada esta parte, el personal forense inicia la siguiente etapa de fumigación y proceden a cerrar los costados de la bolsa impermeable.
Para la tercera etapa también se realiza una nueva fumigación del cuerpo, luego lo introducen dentro de una segunda bolsa impermeable. Según explicaron las autoridades, esto forma parte de las medidas recomendadas por la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Con el propósito de evitar el posible contagio del personal, realizan una última fumigación antes de introducir el cadáver dentro del féretro. De esa forma, hay mayor seguridad de control del virus de haber quedado alguno fuera de superficie.
Para culminar, el equipo procede a cerrar el ataúd, el cual fumigan nuevamente para evitar que el personal resulte afectado si existe la presencia del virus.
La médico, al finalizar la demostración, aconsejó a la ciudadanía permitir y no obstaculizar que las autoridades procedan a dar sepultura a los fallecidos por COVID-19
«Es oportuno en este momento permitir que personas fallecidas por coronavirus, tengan un entierro digno, es oportuno ser solidarios y empáticos. Nadie está exento de esta enfermedad», agregó.
