Redacción. La consejera presidenta del Consejo Nacional Electoral (CNE), Cossette López, respondió este domingo con contundencia a las acusaciones vertidas por el consejero Marlon Ochoa, quien denunció públicamente un supuesto intento de fraude electoral promovido desde el propio órgano electoral.
López calificó los señalamientos como parte de una campaña orientada a socavar la confianza en el proceso democrático a pocos meses de los comicios generales, que se celebrarán el próximo 30 de noviembre.
«No me presto a ese tipo de cosas (sobre el presunto fraude), y aquí que gane quien tenga que ganar», afirmó la consejera presidenta del órgano electoral al referirse a las declaraciones de su homólogo.
López rechazó categóricamente cualquier insinuación de manipulación interna en la divulgación de resultados preliminares, y defendió con firmeza los procedimientos técnicos y legales del CNE.
Durante su intervención, explicó que el trabajo del Consejo se limita a la recepción, análisis y sumatoria de actas transmitidas por las Juntas Receptoras de Votos (JRV), dejando claro que son estas últimas las encargadas del conteo directo de sufragios.

“Son dos organismos con funciones diferentes. El CNE no manipula votos, verifica, analiza y suma actas conforme a la ley”, puntualizó en entrevista a un medio de comunicación local.
Transparencia
López también salió al paso de las críticas en torno al sistema de Transmisión de Resultados Electorales Preliminares (TREP), subrayando que si bien este no tiene valor legal, sí constituye una herramienta para ofrecer datos informativos con mayor rapidez y transparencia.
El verdadero desafío, explicó, está en fortalecer los mecanismos de verificación cruzada entre partidos y autoridades electorales: “Si ellos ganan, tendrán protegidos sus resultados. Yo lo que no entiendo es por qué se oponen a que corrijamos los errores en el proceso. Todos sabemos que de un TREP mal divulgado es difícil retornar», cuestionó López.
Asimismo, destacó los esfuerzos actuales del órgano electoral por introducir mejoras técnicas y corregir falencias históricas del sistema. “Desde antes de llegar al CNE observé falencias que ahora tratamos de corregir. De la elección de 2021 no tenemos rastros de verificación. Lo que proponemos es más trazabilidad, más transparencia”, dijo.
Posteriormente, la consejera presidenta del CNE se pronunció a través de su cuenta oficial en la red social X, reafirmando el compromiso del organismo con la legalidad y la transparencia en el proceso electoral.
Compromiso
En su publicación, advirtió que no se cederá ante presiones ni amenazas, y recordó que el pasado 15 de junio se decidió verificar las actas el mismo día de la elección, conforme a lo establecido en los artículos 279 y 283 de la Ley Electoral.
El artículo 279 regula la divulgación de los resultados preliminares y establece que el órgano electoral debe iniciar la publicación de estos datos, de manera periódica y continua, como máximo tres horas después del cierre de las votaciones.
Por su parte, el artículo 283 se refiere al escrutinio general, es decir, al proceso oficial, mediante el cual el CNE verifica, analiza y consolida las actas emitidas por las Juntas Receptoras de Votos, con la facultad de contrastar y resolver posibles inconsistencias.
Mientras Ochoa advierte que esta fase puede permitir una “intromisión humana” capaz de alterar resultados antes de su divulgación, López insiste en que el CNE actúa conforme a la ley, limitándose a sumar actas y garantizar la trazabilidad del proceso electoral.

Las decisiones por parte del órgano electoral se hacen por medio de la votación de los tres consejeros y se aprueban con la mayoría de votos, según lo establecido en la ley electoral.
«La ley y la transparencia no se negocian», afirmó de manera categórica. Además, López enfatizó que esta medida representa un cumplimiento del marco legal: «verificar es cumplir la ley. Revisar es transparentar», escribió.
En ese sentido, fue enfática al declarar: «No insistan más en retroceder. Nuestra respuesta es clara: NO». López concluyó que el CNE se mantendrá firme, sosteniendo que «quien se sostiene en la ley, se sostiene en el pueblo».
Señalamientos
Las declaraciones de López se producen tras la denuncia por Marlon Ochoa, consejero representante por el partido Libertad y Refundación (Libre), quien en conferencia de prensa advirtió sobre lo que calificó como un intento de fraude electoral impulsado por el “bipartidismo”, representado, según él, por las otras dos consejeras del CNE.
Ochoa alertó sobre la presunta existencia de “intromisión humana” en la fase de divulgación de resultados preliminares. Esto, según su criterio, podría dar paso a la manipulación de los datos transmitidos por las Juntas Receptoras de Votos.
«Las consejeras del bipartidismo aún hoy optan por mantener un mecanismo diseñado para alterar los resultados enviados por las Juntas Receptoras de Votos», declaró Ochoa.
«Debe eliminarse del flujo de la divulgación, la intromisión humana que fue aprobada por la mayoría de votos», manifestó.

Según explicó, había propuesto una reforma para eliminar dicha figura, respaldándose en un dictamen jurídico interno. Sin embargo, la iniciativa fue rechazada por las otras consejeras, a quienes acusa de responder a intereses políticos tradicionales.
Estas declaraciones han generado suspicacias en algunos sectores que señalan al consejero del partido oficialista de intentar revertir en la decisión tras haber perdido la votación.
Ante la creciente tensión, el proceso electoral ya evidencia una profunda división dentro del órgano electoral, marcada por los constantes señalamientos del consejero Ochoa. Esta fractura podría afectar seriamente la confianza ciudadana y poner en riesgo la estabilidad democrática del país.