Mundo.– Un buen viaje por carretera invita a la espontaneidad y te permite paradas para explorar un café con un menú apetitoso o disfrutar de una vista interesante cuando se presenta la oportunidad.
- Itinerario: Haz una lista de los lugares que te gustaría visitar. Quizá suene un poco obvio, pero un viaje por carretera requiere una planificación dependiendo del tiempo que tengas a tu disposición: saber cuánto tiempo emplearás en ir desde A hasta B y qué paradas podrías hacer es algo muy importante, sobre todo si tienes billetes de avión reservados para la vuelta a casa. A la hora de examinar un mapa es fácil cometer el error de planificar demasiados lugares para visitar, ya que puede parecernos que la distancia es corta entre ellos, pero la realidad es que la carretera puede ser más angosta de lo que pensábamos, el tiempo puede troncarse y dificultar la conducción o el tráfico puede ser demasiado intenso.
- Alojamiento: En cuanto el hospedaje, lo mejor es programar al menos dos noches en cada destino y así tener tiempo suficiente para visitar la zona y viajar sin prisas, algo con lo que se disfrutará más del camino al tener más margen de tiempo.
- Coche: Si es tu propio coche con el que viajas asegúrate de que todo funciona correctamente antes de comenzar. Si por el contrario planeas alquilar un vehículo, cerciórate de tener el seguro correcto y revisa el coche para advertir los posibles desperfectos antes iniciar la marcha.
Otros consejos
- Normativa: Investiga las normas de conducción del país que visitarás. Esto te ayudará a saber qué documentación para conducir llevar y cuál es el límite de velocidad y otras reglas que pueden variar de un país a otro. Asegúrate de que se permite que tu coche circule en todas las carreteras. Por ejemplo, si vas a alquilar una autocaravana, tienes que saber que está considerado como vehículo pesado y en algunas carreteras secundarias no están permitidas por el riesgo que conlleva.
- Comida: Lleva siempre cubiertos, platos y vasos. Un viaje por carretera mal planeado podría conllevar comer, la mayoría de los días, comida rápida o gastar mucho dinero en restaurantes. Mejor evítalo parando en supermercados locales y comprando alimentos frescos para hacer un picnic. Además de más sano, le sentará mejor a tu bolsillo.
- Aseo: Incluye en tu maleta artículos de higiene que sean cómodos de utilizar, como toallitas húmedas. Muchas veces puede ser la única forma de asearse rápidamente.
Música
- Mapas: Lleva uno de papel. Puede parecer algo anticuado teniendo al alcance navegadores GPS e internet, pero cuando el GPS no tiene señal o el smartphone no tiene cobertura te alegrará tener cerca un mapa de carreteras. Además, es recomendable invertir algo de dinero en más datos para el móvil y en batería portátil en lugar de un GPS, ya que las compañías de alquiler de coches cobran una tarifa muy alta por ellos.
- Música: A pesar de que siempre quedará la radio, ya que vas a conducir todo el día, es mejor tener la música que más te gusta en diferentes listas de reproducción, tanto en CD como en dispositivos MP3. ¡El viaje será más divertido!
- Seguro de viaje: Contratiempos como la cancelación o interrupción del viaje implica tener que anular las reservas que teníamos confirmadas para nuestro viaje por carretera, ya sean alquiler de coche o alojamiento. Un seguro de cancelación de viaje nos reembolsaría estos gastos que no podremos disfrutar durante el mismo. Además, en caso de accidente también quedaría cubierta las asistencia médica y o quirúrgica gracias a nuestro seguro de viaje.