Redacción. La Fiscalía Especial de Protección al Consumidor y Adulto Mayor (FEP-CAM) dictó condena de un año con seis meses de prisión en contra de Marina Esther Flores Peña, por daños culposos en perjuicio de Carlos Antonio González Espinal.
De acuerdo con las investigaciones, el 31 de julio de 2018, aproximadamente, a las 5:45 de la mañana, Gózales se encontraba en su domicilio cuando escuchó un estruendo y salió al estacionamiento para saber lo ocurrido. Se sorprendió al observar que su vehículo estaba chocado y que el automotor participante se encontraba en una esquina.
Asimismo, notó que la persona que impactó el vehículo se daba a la fuga. No obstante, el dueño del vehículo perjudicado alcanzó a la hechora. Llegó a un acuerdo con la señora Marina Esther Flores Peña, quien respondió que “pagaría por todos los daños ocasionados al automotor”.
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En ese sentido, trasladaron el vehículo a un taller para su reparación. Pero la imputada no cumplió con la totalidad de los daños ocasionados con el bien del ofendido.
Consecuencias
El señor Carlos Gómez estuvo en contacto con María flores durante tres meses, pero ella sólo le respondía con pretextos. Como resultado, Gómez decidió interponer la denuncia en el Ministerio Público (MP).
El MP calificó los actos de la irresponsable conductora como delitos de negligencia inexcusable en la prestación de un servicio, citando el artículo 95, numeral 2, de Ley de Protección al Consumidor, además de la apropiación indebida.
Finalmente, el Ministerio Público indicó que la imputada no cumplió con la totalidad del valor de la reparación de los daños ocasionados con el bien del ofendido. Acción que derivó en la condena de más de año y medio en su contra.
De igual forma, el Código Penal en el artículo 255 especifica que los daños culposos se sancionarán con una pena igual a la mitad de la correspondiente al daño doloso. Que va de 3 a 5 años de cárcel.