REDACCIÓN. Un tribunal dictó sentencia contra dos personas responsables de la muerte de un niño de cinco años en el año 2009. La Fiscalía Especial de Protección a la Niñez y Adolescencia de La Ceiba obtuvo una condena de 20 años de prisión contra Blas Antonio Romero. Fue hallado culpable del delito de parricidio. Su pareja, Lirio Aracely Villafranca, recibió una pena de 15 años por homicidio simple.
Ambos fueron capturados en febrero de 2025 en Juticalpa, Olancho. Desde 2016 se encontraban en rebeldía, tras no presentarse al juicio correspondiente. Su aprehensión permitió continuar con el proceso judicial.
La investigación estaba dirigida por la Fiscalía de Niñez y Adolescencia, con apoyo de la Dirección Nacional de Investigación Criminal (DNIC). Gracias a ese trabajo, se logró esclarecer lo ocurrido el 17 de junio de 2009, cuando las autoridades encontraron el cuerpo del menor en una vivienda de la colonia Sinaí, sector Bonitillo, en La Ceiba.
Le puede interesar también: Hijo aparece amarrado y muerto tras agredir a su madre en Santa Bárbara
La autopsia determinó que el niño falleció a causa de un fuerte golpe en la cabeza. El análisis forense reveló que tenía múltiples heridas en su cuerpo. La investigación concluyó que el padre fue quien le propinó el golpe mortal.
Durante años, los responsables lograron evadir la justicia. Sin embargo, la coordinación entre fiscales e investigadores permitió localizarlos y llevarlos ante los tribunales.
La condena reafirma el compromiso de las autoridades para proteger a la niñez hondureña. También envía un mensaje claro: los crímenes contra menores no quedarán impunes. La Fiscalía aseguró que continuará trabajando para que se respeten los derechos de la niñez. Asimismo, buscaran que casos como este se castiguen con severidad.