Redacción. A medida que la edad avanza, la piel experimenta cambios significativos. A partir de los 45 años, la pérdida de firmeza, la deshidratación y la aparición de arrugas y manchas son preocupaciones comunes.
Sin embargo, según la Dra. Rosa del Río Reyes, una dermatóloga de renombre, es posible mantener una piel sana y luminosa con la rutina y los productos correctos.
La Dra. del Río explica que entre los 45 y los 55 años, los cambios hormonales, como la disminución de estrógenos, impactan directamente en la piel. Esto se traduce en una menor producción de colágeno y elastina, lo que lleva a una mayor flacidez y a una piel más fina y frágil.
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Cosméticos esenciales
Para combatir estos signos de la edad, la dermatóloga aconseja reforzar la rutina diaria con productos clave. Además de la limpieza, la hidratación y el protector solar, que son esenciales a cualquier edad, la Dra. del Río recomienda integrar los siguientes activos:
- Antioxidantes: Como la vitamina C, que protegen la piel del daño ambiental y mejoran la luminosidad.
- Retinoides: El retinol es un ejemplo que acelera la renovación celular, combate las arrugas y mejora la textura de la piel.
- Despigmentantes: La niacinamida es ideal para reducir manchas y unificar el tono.
Rutina
La experta detalla una rutina simple pero efectiva para el día y la noche.
- Por la mañana:
- Limpieza: Para eliminar impurezas y sebo.
- Antioxidantes: Para proteger la piel durante el día.
- Hidratación: Para mantener la barrera cutánea.
- Protector solar: Un paso imprescindible para prevenir el fotoenvejecimiento.
- Por la noche:
- Limpieza: Para retirar maquillaje y residuos.
- Renovación: Con un producto a base de retinoides para estimular la regeneración.
- Hidratación: Opcional, si la piel necesita un extra de humectación.
Con estos sencillos pasos, es posible adaptar el cuidado de la piel a las necesidades de la edad y mantener un aspecto radiante y saludable.
