Redacción. Nelson Ávila, candidato a la presidencia por el Partido Innovación y Unidad Social Demócrata (Pinu-SD), se refirió este sábado a la crisis electoral que vive el país, raíz de la división en el Consejo Nacional Electoral (CNE) y otros actores importantes del proceso electoral.
El aspirante señaló que hay sectores con incertidumbre y otros con certidumbre, calificando la situación actual como “una desorganización bien organizada”. Además, dijo que no hay voluntad política para desarrollar un proceso electoral limpio y democrático.
“Hay incertidumbre, pero también certidumbre en aquellos que necesitan las elecciones para validar, según ellos, fraudes. No les interesan las elecciones para que sean honestas, libres y democráticas”, aseguró en Noticieros Hoy Mismo, en referencia a los partidos con mayor caudal electoral.

Ávila recordó el caos del proceso electoral primario de marzo, señalando que ningún partido logró superar los 500 mil votos.
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Criticó además los ataques a las instituciones electorales, como el CNE y el Tribunal de Justicia Electoral (TJE). “Aquí no funciona la institucionalidad electoral, entonces debilitan a las instituciones electorales como al CNE, TJE, la Unidad de Política Limpia, las Fuerzas Armadas, la fiscalía; eso demuestra que se pretende hacer todo menos elecciones limpias”.
Llamado al voto joven
En ese sentido, el político y analista instó a los jóvenes a acudir masivamente a las urnas el domingo 30 de noviembre, dado que este grupo de la población es vital para lograr un cambio en Honduras.
“Nosotros creemos que si los jóvenes y las mujeres son los que tienen que decidir este proceso, representan casi el 80 % de la población. Con esa población podemos cambiar el rumbo para que la gente ya no piense en colores, sino en su presente y futuro”, apuntó.

Respecto al transporte electoral, señaló que fue una crisis creada desde el CNE, ya que sectores, que no especificó, lograron dividir la relación del órgano electoral con los transportistas privados.
Explicó que las elecciones en Honduras, en el fondo, son inconstitucionales al excluir a diversos sectores, así como a gran parte de la población que vive en el extranjero.
Finalmente, Ávila tildó las acciones del Ministerio Público como persecución contra los magistrados del TJE por parte de sectores que buscan generar caos en el país.
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