Redacción. La espontaneidad de una joven colombiana llamada Marcela Paz se hizo viral en redes sociales luego de lanzar un mensaje dirigido a los hondureños, en el que resaltó la fortaleza y el carácter que, según ella, distinguen a los habitantes del país.
En un video, la mujer no ocultó su asombro al describir lo que para ella es una de las características más notables de los catrachos: su temperamento fuerte y resiliente. Con un estilo cargado de humor y expresiones típicas de Colombia, dijo: “Marica, ¿y ese carácter? ¿Y ese carácter ustedes de dónde lo sacan? Vea, no se meta con un hondureño. Usted métase con quien sea, pero con un hondureño no. ¡Juéla!, eso es para que lo insulten en el acto”.

Durante su mensaje, Marcela Paz destacó, además, la fortaleza de las mujeres de Honduras, a quienes describió como trabajadoras, resilientes y con un carácter imponente. “La mujer hondureña es demasiado resiliente, demasiado fuerte. O sea, aparte que son super trabajadoras, tienen un carácter, marica, que da miedo. Yo no me meto con una”, expresó con total sinceridad.
La colombiana aseguró que el carácter de las hondureñas impone respeto y reconoció que, al cruzarse con una de ellas, prefiere mantener la distancia con respeto y admiración.
Reacciones
La intervención de Marcela Paz no tardó en generar reacciones entre los usuarios, quienes, entre bromas y orgullo, dieron su opinión.
Entre las respuestas más destacadas estuvieron:
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“Es el hierro de los frijoles”, bromearon algunos usuarios, aludiendo a la fortaleza y resistencia de los hondureños.
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“Ya venimos así de fábrica, con el diablo dentro”, dijo otro, en tono jocoso, mostrando orgullo por el carácter nacional.
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“Soy de Colombia y vivo en Honduras, mi esposo es hondureño y amo Honduras, yo pensaba lo mismo al principio cuando llegué aquí pero gracias a Dios me adapté, que viva Honduras”, compartió una extranjera residente, señalando cómo logró integrarse.
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“Las mujeres hemos agarrado el carácter de los hombres”, coincidieron varias mujeres hondureñas, destacando que la fuerza y determinación no son exclusivas de los hombres.