Redacción. Un duro golpe ha recibido el sector camaronero hondureño tras el reciente anuncio de que solo uno de los 150 contenedores de camarón negociados con China será exportado a Pekín.
Los productores, que habían puesto todas sus expectativas en este acuerdo comercial, ahora se sienten burlados y engañados.
Lo que comenzó como una prometedora oportunidad de expansión hacia el mercado asiático ha terminado en una amarga decepción, según lo denunció Javier Amador, director ejecutivo de la Asociación Nacional de Acuicultores de Honduras (Andah).
Tras meses de intensas negociaciones, que incluyeron visitas de enviados chinos a Honduras, inspecciones a las fincas productoras en la zona sur y acuerdos sobre temas sanitarios y precios, la noticia cayó como un balde de agua fría.
Consternación
«Después de todo ese esfuerzo, que ahora salgan con ese mal chiste es simplemente inaceptable», criticó Amador, visiblemente molesto. La frustración de los productores se agrava al saber que, a pesar de las largas pláticas y la coordinación logística para la exportación de los 150 contenedores, los compradores chinos han decidido adquirir solo uno.
Amador calificó la decisión como «desagradable, grosera y descortés», una falta de respeto hacia los productores que habían puesto todos sus recursos en la preparación de los camarones para cumplir con el ambicioso acuerdo.
Dejó entrever que que habría una pausa en las negociaciones, pero jamás pensaron que sería para retroceder de esta manera.
El líder camaronero dejó claro que el trabajo ya estaba hecho. Los productores no solo habían cultivado el camarón necesario, sino que incluso se habían distribuido los ingresos esperados de los 150 contenedores. «Ahora, que busquen qué hacer con el producto», sentenció Amador.
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Ante esta crisis, Gerardo Torres, vicecanciller de Honduras, aseguró que el gobierno ya está trabajando en una solución para los acuicultores.
Entre las opciones que barajan, mencionó la posibilidad de reducir costos. Además, sugirió la posibilidad de explorar nuevos mercados, como el camarón especial, para mitigar los efectos de la abrupta cancelación.
Sin embargo, los productores esperan que las autoridades tomen medidas rápidas y efectivas, pues este impase con China representa no solo una pérdida económica, sino también una oportunidad frustrada para consolidar la presencia hondureña en el competitivo mercado asiático.