29.6 C
San Pedro Sula
domingo, abril 13, 2025

Lleva esperanza a discapacitados con terapia con animales: la innovadora ayuda de Juan Montenegro

Debes leer

REDACCIÓN. Juan Montenegro es un hombre apasionado por ayudar a los demás, alguien que encuentra en los animales una forma de transformar vidas. Como fundador del Centro Hondureño de Terapia Asistida con Animales (Cenhtaa), ha dedicado su vida a brindar apoyo a niños con discapacidades a través de la interacción con animales.

Desde su formación como perito mercantil, contador público y profesor de educación canina, Montenegro ha recorrido un camino singular que lo llevó a convertirse en perito canino. Su labor en Cenhtaa es única en Honduras, ya que es la primera ONG en el país que emplea distintos tipos de animales para terapias de apoyo emocional.

La inspiración para este proyecto nació en Guatemala, cuando Juan asistió a una exposición canina y presenció una demostración de terapia con niños con síndrome de Down y autismo. Al regresar a Honduras, investigó y descubrió que no existía en el país ninguna iniciativa similar. Esto lo motivó a crear un espacio donde los animales pudieran desempeñar un rol terapéutico para niños con discapacidades.

Juan Montenegro
Montenegro es un apasionado de los animales.

¿Qué es Cenhtaa y cómo funciona?

Cenhtaa es el primer centro de terapia asistida con animales en Honduras, dedicado a ayudar a niños con autismo, síndrome de Down y parálisis, entre otras condiciones. Su equipo está compuesto por cinco técnicos que han trabajado junto a Juan durante los siete años de existencia de la fundación.

Las terapias se adaptan a cada niño según su diagnóstico y necesidades específicas, abordando áreas como la motricidad fina y gruesa, el lenguaje y la interacción social.

Juan Montenegro
Los beneficiarios pasan por etapas de adaptación e interacción progresiva.

Los perros son los protagonistas de Cenhtaa, y se seleccionan según su raza y características instintivas. «Por ejemplo, los labradores son ideales para estimular la motricidad fina, ya que su instinto natural de buscar objetos permite a los niños trabajar movimientos de manos y brazos», explicó Montenegro. Los San Bernardo, en cambio, son utilizados para fortalecer la motricidad gruesa, ya que su gran tamaño y estabilidad permiten trabajar el equilibrio y la marcha.

Además de los perros, Cenhtaa cuenta con caballos para la hipoterapia, donde el calor del cuerpo del animal contribuye a estimular los músculos de los niños con parálisis o autismo en grados uno y dos. También emplean guacamayas para fomentar el aprendizaje de colores y estimular el lenguaje, y patos para trabajar la parte auditiva a través de sus sonidos. «Ponemos a los niños a dibujar las guacamayas y esa es su alegría: ver en persona al animal y dibujarlo», compartió el fundador.

Las terapias en Cenhtaa están diseñadas para generar cambios positivos en la vida de los niños y sus familias. Los beneficios son tanto físicos como emocionales: los niños experimentan una mayor alegría y motivación al interactuar con los animales, mientras que los padres ven mejoras en su desarrollo y comportamiento.

Las personas pueden abocarse a la cuenta de Facebook Cenhtaa para ser beneficiario del programa.

Desafíos y logros

Uno de los mayores retos que enfrentó Montenegro al fundar Cenhtaa fue la aceptación del público. Además, la ONG no contaba con un espacio propio y dependía de locales rentados. Sin embargo, con el tiempo, la fundación ha logrado consolidarse y ganar la confianza de la comunidad.

Los perros son el pilar de la terapia.

«No contamos con apoyo del Gobierno, nos han mentido… Quisiéramos tener más tipos de animales, pero estamos escasos de apoyo, quisiéramos que alguna empresa o institución se fijara en nosotros y nos ayudara a hacer alguna actividad y no tener que decirle a los padres de familia que ya no hay presupuesto», lamentó.

A pesar de las dificultades, Montenegro y su equipo han logrado apadrinar a grupos de niños cada tres meses, asegurando que continúen recibiendo tratamiento.

Cada año, Cenhtaa atiende a aproximadamente 300 personas, incluyendo niños, jóvenes y adultos. Su modelo de trabajo consiste en agrupar a los beneficiarios y llevar a cabo terapias en ciclos de tres meses. Durante este tiempo, los niños van progresando desde la etapa de adaptación hasta la plena interacción con los animales, lo que permite observar mejoras significativas en su desarrollo.

Actualmente, la fundación opera en Tegucigalpa, pero ha recibido invitaciones para expandirse a otras ciudades como La Paz. Sin embargo, la falta de recursos ha dificultado la expansión del proyecto.

El futuro de Cenhtaa

A pesar de las limitaciones económicas, Montenegro tiene grandes planes para el futuro. Le gustaría expandir el programa a hospitales y centros de salud. También desea trabajar con niños con cáncer y con madres e hijos en centros penitenciarios.

La fundación atiende a niños adultos y ancianos.

Además, Montenegro busca establecer alianzas con empresas e instituciones para garantizar la sostenibilidad de Cenhtaa a largo plazo. La fundación necesita donaciones para mantener a los animales en óptimas condiciones, así como para cubrir los costos de transporte y materiales didácticos.

¿Cómo apoyar?

Las personas interesadas en contribuir con Cenhtaa pueden hacerlo de diversas formas: como voluntarios, donantes o mediante alianzas estratégicas. La fundación está legalmente registrada y ofrece recibos fiscales a las instituciones que realizan donaciones.

Para los voluntarios, Cenhtaa ofrece distintas oportunidades de participación, desde el cuidado de los animales hasta la organización de eventos y actividades de recaudación. Aunque no todos los voluntarios tienen experiencia con animales, Montenegro cree que cualquier persona con vocación de servicio puede aportar al proyecto.

Frase: «Soy una persona muy servicial, muy amigable, y me gusta ayudar a las personas».

Dato: Cenhtaa atiende aproximadamente a 300 personas al año, incluyendo niños, jóvenes y adultos.

Última Hora

Hoy en Cronómetro

error: Contenido Protegido