Redacción. Miles de migrantes partieron en caravana desde Tapachula, en la frontera sur de México, con la esperanza de llegar a Estados Unidos, y deseando, en el marco de las elecciones presidenciales en USA, que no se endurezcan las políticas migratorias.
Los migrantes, mayoritariamente de Venezuela, Honduras y otros países de América Latina, expresaron su preocupación ante la posibilidad de que las políticas migratorias se endurezcan si Donald Trump, candidato republicano, resulta electo.
Ehison Díaz, migrante venezolano, comentó a una agencia internacional que muchos de ellos temen un triunfo de Trump.
Avizoran, que el magnate les cerrará las puertas a quienes buscan mejores oportunidades en Estados Unidos. «Somos una clase obrera dispuesta a trabajar y necesitamos una oportunidad», declaró.
La caravana, denominada «Niño Jesús», incluye a hombres, mujeres y niños. Estos exigen a las autoridades migratorias mexicanas la regularización de su estatus para avanzar libremente en el país.
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Auxilio
Durante el paso por el primer retén en el «Ejido Viva México», los migrantes coreaban demandas de «¡Queremos papeles!» a los agentes de migración, quienes, a través de altavoces, les pedían avanzar con precaución.
Nelson Mejía, un migrante hondureño, pidió solidaridad a la ciudadanía mexicana, lamentando la falta de permisos para circular en el país, que muchos han esperado por hasta diez meses sin éxito.
«Las promesas de transitar en México son mentira», señaló, preocupado por la posibilidad de enfrentar leyes migratorias más restrictivas en Estados Unidos.
El observador migratorio Luis Rey García Villagrán estimó que unos 2,500 migrantes salieron de Tapachula, aumentando a medida que personas de diversas nacionalidades. Sostienen que el grupo que se sumó al camino hacia el norte provienen de: China, Perú y Ecuador.