CORTÉS, HONDURAS. Desde la noche del lunes 29 de marzo, alrededor de 200 y 250 personas llegaron a la Terminal Metropolitana de Buses en San Pedro Sula para partir al día siguiente en caravana hacia los Estados Unidos.
Se dirigieron hacia Corinto, de modo de cruzaron todo Choloma, Puerto Cortés y Omoa también, enfrentando muchos retenes policiales que les pedían documentación. Solo unos pocos lograron cruzar la frontera de Corinto, otros decidieron irse por los puntos ciegos, pero la gran mayoría, fue devuelta.
El comisario de la Policía Nacional, Saúl López, dio a conocer que entre los migrantes habían cuatro con órdenes de captura pendientes y retornaron a 25 menores de edad por viajar sin compañía de un adulto.
Vicepresidenta de EEUU agradece
Si los operativos de la Policía hondureña no funcionaban, «en Guatemala» aguardaban otros «más fuertes», advirtió López, acción que la vicepresidenta de Estados Unidos, Kamala Harris, según publicó AFP.
Harris dialogó con Alejandro Giammattei, presidente de Guatemala, sobre su control en la frontera con Honduras.
Durante la llamada, Harris y Giammattei discutieron sobre los riesgos de emprender «el peligroso viaje a Estados Unidos, especialmente durante una pandemia mundial», y convinieron en colaborar para «crear las condiciones para ampliar las oportunidades para las personas en sus países de origen».
La oficina de Harris dijo que la vicepresidenta «reafirmó» al mandatario guatemalteco el compromiso del gobierno de Biden de «expandir las alianzas para beneficiar a la gente de la región».
«Acordaron explorar oportunidades innovadoras para crear empleos y mejorar las condiciones para todas las personas en Guatemala y la región, incluso mediante la promoción de la transparencia y la lucha contra la delincuencia», según un comunicado.
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