SAN PEDRO SULA. Tres individuos fueron detenidos por la Agencia Técnica de Invetigación Criminal (ATIC) tras ser acusados de la muerte de dos hombres en la Residencial Los Cedros, zona norte de Honduras.
Los esposados responden a los nombre de: José Eduardo Gavarrete Alvarenga, Carlos
Nolberto Andrade y German Antonio Maldonado Zúniga, quienes fueron
apresados la noche del viernes en el centro de la ciudad.
Según lo notificado por las autoridades, los sujetos forman parte de un grupo criminal que acabó con la vida de los dos jóvenes. Quienes respondían a los nombre de Luis Fernando Pinto Romero y Hugo León Arita
Calderón.
De esos asesinatos también fueron acusados Edgardo Reynerie Rodríguez
Ramos y Fernando Rafael Guillén, este último resultó herido. Los cinco sujetos están ligados también al hallazgo de ocho kilos de cocaína. Se dijo que estos estaban escondidos en predios cercanos a la residencial adonde ocurrió el crimen.
LOS HECHOS
Según información de la Policía, sujetos que llegaron en un pick-up, marca Toyota Hilux, estaban de visita en una residencia y al poco tiempo en dos carros llegaron otros individuos que burlaron la seguridad de la residencial haciéndose pasar por policías.
Los criminales al llegar a la vivienda cortaron la energía eléctrica y sometieron a tres personas que estaban en el lugar. Y fue cuando en el interior de la casa ocurrió un enfrentamiento a balazos. Del tiroteo quedaron dos hombres muertos, uno de ellos en el pasillo dentro de la casa y otro en la parte trasera del patio.
Una de las víctimas fue identificada por las autoridades como Luis Fernando Pinto Romero y el otro occiso no portaba documentos. Por lo que fue llevado a Medicina Forense como desconocido. Personas que estaban en el lugar no quisieron dar el nombre a las autoridades del Ministerio Público. Así tampoco, a los agentes de la Dirección Policial de Investigaciones (DPI).
COMO DE PELÍCULA
Uno de los propietarios de la vivienda fue golpeado por los criminales. y paramédicos del 911 le dieron los primeros auxilios, luego fue llevado a un centro médico.
Los criminales después de cometer el doble asesinato escaparon del lugar; pero los pobladores llamaron al 911. Por lo que varias patrullas policiales en una rápida acción los persiguieron y lograron alcanzarlos en el sector de Armenta. Allí, uno de ellos, Fernado Rafael Guillén Solís, que resultó herido en el tiroteo de la vivienda, se entregó a las autoridades. Seguidamente, fue trasladado al hospital Mario Catarino Rivas.
Otro supuesto sicario, identificado como Edgardo Reiniery Rodríguez Ramos, quien intentó huir, también fue detenido cuando se cambiaba de ropa, y le quitaron una pistola. A los
sicarios les decomisaron un Toyota Tacoma, negro, placas PEE 7938, también encontraron otro carro Toyota Hilux, color dorado en el que escaparon los otros sicarios. Patrullas de las Policías Nacional y Militar hicieron operativos en la zona para tratar de dar con los otros matones. El hecho criminal quedó registrado en las cámaras de seguridad de la colonia.
