Tegucigalpa. La capa de humo que cubre las ciudades de Tegucigalpa y Comayagüela debido a los diversos incendios forestales ocasionados en los últimos días en la capital, podría provocar afecciones respiratorias y otras enfermedades, según expertos.
De acuerdo con la especialista en toxicología del Centro Toxicológico (CENTOX) de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH), Claudia Caballero, el humo generado producto de un incendio contiene una serie de componentes químicos dañinos a los seres humanos.
La especialista explicó los tipos de afecciones respiratorias que provoca este fenómeno.
“La presencia de gases irritantes que se pueden encontrar son dióxido de nitrógeno, de azufre y monóxido de carbono”, dijo Caballero.
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En ese sentido, -estos componentes- “producen daños en el sistema respiratorio”, asegura.
Lo anterior, ya que “por esta vía entran al organismo y ocasionan irritación en la garganta y ojos, dificultad para respirar y dolor de cabeza; así como en algunas personas que padecen asma le desencadena esta enfermedad”, expresó la profesional de la medicina.
Los más afectados
De igual manera, Claudia Caballero explicó que los menores de edad y las personas de la tercera edad son los más afectados por esta capa de humo.
Lo anterior, “porque poseen menos defensas para contrarrestar los componentes dañinos de esta bruma provocada por un incendio”, explicó.
COPECO también ha advertido de los efectos de esta capa de humo:
Así amanece la ciudad capital #TGU cubierta por una densa bruma debido a los incendios forestales suscitados los últimos días. Evitemos los incendios forestales, estos provocan este tipo de impactos ambientales que dañan nuestra salud. pic.twitter.com/f4DNe9CVtq
— COPECOHONDURAS (@COPECO_HONDURAS) April 2, 2018
Recomendaciones
Las recomendaciones más importantes que las autoridades han dado a conocer, son las siguientes:
- No quemar basura de ningún tipo.
- Para las personas que ejercen su trabajo en exteriores, se recomienda usar ropa adecuada de colores claros e hidratarse.
- En la medida de lo posible evitar realizar actividad física al aire libre.
- Se recomienda tomar de ocho a diez vasos con agua o líquidos hidratantes.
- Dentro del hogar evite fumar, levantar polvo, no encender velas, candiles o chimeneas innecesarias; si es posible cierre puertas y ventanas y encienda el aire acondicionado o ventilador. Debe mantener el fogón encendido estrictamente el tiempo que requiere para cocinar.
- Menores de edad, personas adultas mayores y embarazadas: si presentan síntomas de enfermedades respiratorias acudir a un centro médico de inmediato.
- Las personas con afecciones cardíacas o pulmonares deben de protegerse con mascarillas especiales para humo de incendio (no es la misma que se utiliza contra el polvo) y debe estar atento a ser atendido en un centro médico.
- Apagar el automóvil cuando esté en un tráfico vehicular paralizado por obras de infraestructura vial o accidente.
- Evitemos los incendios forestales.
