Redacción. El católico hondureño Carlos Andrés Ferrera se hizo acreedor al premio a la mejor canción de rock en los Catholic Music Awards, celebrados el pasado fin de semana en el Vaticano.
La primera edición de estos galardones fue todo un éxito. La iniciativa nació del presidente de la Fundación Ramón Pané, el cardenal emérito de Honduras, Óscar Andrés Rodríguez Maradiaga, quien también viajó al Vaticano para asistir a la entrega.
Dicha fundación es una organización cristiana católica que se enfoca en la formación integral de las personas, principalmente a través de la identificación de líderes y el desarrollo de proyectos de cambio mediante la educación.

El accionar se basa en la espiritualidad de la Lectio Divina, promoviendo que la lectura de las escrituras motive a las personas a realizar acciones concretas para su bienestar y el de la sociedad.
Asimismo, colabora con organizaciones y busca alianzas estratégicas para ampliar su impacto. Entre las iniciativas destacan los premios «La Música nos Une», que reconocen la creatividad musical, y la promoción de la Lectio Divina a través de plataformas como Cristonautas.com.
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Talento catracho
Carlos Andrés Ferrera demostró que en Honduras hay personas con mucho talento, además de ser creyentes y entregados a Dios. El catracho celebró con alegría su triunfo, que marca un momento importante en su vida.
Ferrera contó a Vatican News que no es fácil ser cantante de música cristiana católica en Honduras, pero para él ha sido una bendición haber ganado el premio, que lo dejó sin palabras y puso en alto el nombre de su país natal.
«Estoy muy agradecido, sobre todo a Dios, porque sin él nada de esto sería posible. Siento que este proceso ha sido una misión que Dios me ha encomendado a mí, a mi familia y a todos los hermanos que han hecho posible esta premiación. Porque Dios nos sostiene y guía», afirmó.

La entrega de estos premios se llevó a cabo en el marco del inicio del jubileo de los jóvenes, misioneros digitales e influencers católicos en el Vaticano. En total, participaron alrededor de 1,500 cantantes religiosos en 19 categorías y cuatro idiomas: italiano, español, portugués e inglés.
El cardenal Rodríguez indicó que la idea de la premiación nació del secretario ejecutivo de la fundación, Ricardo Grzna, quien ya había introducido la novedad de los Cristonautas: quienes llevan el evangelio a los jóvenes de manera atractiva. Ambos decidieron, el año pasado, durante la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ) en Lisboa, lanzar esta iniciativa.
Las categorías que se premiaron fueron:
- Mejor álbum
- Mejor cantante femenina y masculino
- Mejor cantante nuevo
- Mejor canto litúrgico
- Mejor canción de alabanza y adoración
- Mejor canción de evangelización
- Mejor canción mariana
- Mejor canto de catequesis
- Mejor coro parroquial
- Mejor canción pop
- Mejor canción tropical
- Mejor grupo o banda
- Mejor canción urbana
- Mejor canción rock
- Mejor canción en cada idioma de los cuatro presentes
- Mejor canción de producción
- Mejor canción de ingeniería
- Mejor video musical.
