Redacción. La Cámara de Representantes del Congreso de Estados Unidos aprobó por estrecho margen el megaproyecto de recortes fiscales y gastos impulsados por el presidente, Donald Trump, que ahora pasará a discusión en el Senado. La versión aprobada incluye un gravamen a las remesas de 3.5%.
El plan, bautizado por Trump como «el gran y hermoso proyecto de ley», pasó con una mayoría de 215-214 tras una larga sesión nocturna y luego de que congresistas republicanos conservadores, contrarios a la legislación por considerar que aumenta el déficit, sostuvieran varias reuniones con la Casa Blanca para llegar a un acuerdo.
El voto final se realizó a primera hora de la mañana, al cierre de una maratónica negociación de más de 24 horas. Esta comenzó poco antes del mediodía del miércoles, con los republicanos centrados en cerrar diferencias.
Ahora pasará al Senado, donde será debatido por la mayoría republicana. La intención es que llegue al Despacho Oval de Trump antes del simbólico 4 de julio, Día de la Independencia estadounidense.
¿Qué incluye el plan fiscal de Trump?
El megaproyecto de ley incluye la extensión de las exenciones fiscales de Trump en su primer mandato (2017-2021) y añade nuevas rebajas. Entre ellas se encuentra las exenciones a las propinas y a los pagos para comprar automóviles fabricados en Estados Unidos.
También, incluye un polémico impuesto a las remesas enviadas fuera del país, el cual pasó del 5% propuesto por el gobierno de Trump a 3.5%, tras la sesión maratónica. El gravamen es aplicable a indocumentados y personas con visas, pero no a ciudadanos y residentes legales permanentes.
Incluye un incremento en los fondos para el manejo fronterizo y la aplicación de la dura política migratoria del presidente republicano, así como restricciones a los programas de ayuda de comida y de asistencia sanitaria Medicaid y Medicare, entre los temas más polémicos en las negociaciones.
También, estipula un aumento en el límite de exenciones a impuestos locales y estatales, otro de los puntos de discordia entre legisladores.
Según la más reciente proyección de la Oficina de Presupuesto del Congreso (CBO en inglés), el proyecto de ley sumará 2.4 billones de dólares en 10 años a la deuda nacional, que actualmente se estima en más de 36 billones de dólares.
Para compensar este gasto, la legislación busca recortar la financiación a programas de seguridad social en más de 1 billón de dólares en 10 años.