TEGUCIGALPA, HONDURAS. El rubro del café al año genera casi $1,000 millones al año en divisas, sin embrago, la crisis por el COVID-19, y por los huracanes Eta e Iota podrían hacer que caigan en un 20%, lo que significa que Honduras dejaría de percibir al menos $200 millones este año, según el cafetalero de la zona oriental Fredy Pastrana.
Pastrana, en comunicación con Diario TIEMPO Digital, dijo que se cosechan alrededor de 8 millones de quintales y que a un precio de $125, «estaríamos llegando a $1,000 millones en divisas y generando empleo de 80 a 150 mil personas, si las condiciones fueran normales».
Ante la destrucción causada por Eta e Iota, varios ejes carreteros de las zonas cafetaleras se vieron dañadas. Al respecto, Pastrana se mostró preocupado debido a que la pandemia y los efectos causados por los dos fenómenos naturales, podrían pasarles factura
«Es algo bien preocupante. Nos preocupa que estamos incomunicados en las zonas productoras y no nos podemos dar el lujo más tiempo», agregó.
Explicó que el café no puede estar mucho tiempo en el árbol. «Las pérdidas pueden ser minúsculas o mayúsculas si no habilitamos los tramos dañados», manifestó.
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200 mil quintales se perderían
Refirió que según el Instituto Hondureño Del Café (IHCAFE), se perderían entre 100 y 150 mil quintales de café. «Creemos que el IHCAFE se quedó corto, solo en el municipio de Trojes se perderían entre 40 mil quintales«. De igual forma, recordó que este municipio produce casi 200 mil quintales.
Seguidamente, dijo que el escenario que se miraría en Trojes, se podría replicar en el resto de la caficultura del país; lo que se traduciría en una pérdida de 20% de la cosecha de café si no se rehabilitan los tramos cafetaleros y si no hace sol. El 20% significaría al menos $200 millones en divisas.
Alternativas
De igual forma, comentó a TIEMPO que ellos el martes pasado tenían una reunión con la Junta Interventora de Inversión Estratégica de Honduras (INVEST-H), sin embargo, ante el paso de Iota se tuvo que suspender.
Asimismo, dijo que la idea es concertar una reunión para lo más antes posible habilitar las carreteras. Agregó que al menos sería una semana perdida ante el paso de Iota.
«Si llega diciembre y no hemos habilitado las carreteras será dañino para el sector cafetalero», sostuvo. Aclaró que ellos no están pidiendo que se le de mantenimiento a toda la red, sino, que se habiliten los tramos que están incomunicados para que lleguen los cortadores de café y puedan salir con el producto final.
Indicó que no se puede esperar a ver un proyecto mayúsculo, sino, a lograr que la producción logre avanzar.
Recalcó que sería el 20% de la producción que se perdería si al 15 de diciembre las carreteras no están habilitadas.
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