Redacción. Audi ofrece actualmente una de las gamas más completas de coches eléctricos del mercado. El Audi Q4 Sportback e-tron es el modelo de la firma alemana para acceder a la movilidad 100 % eléctrica, sobre todo si se escoge la variante e-tron 45.
Este eficiente y atractivo SUV de Audi compite en el segmento de los compactos, con una longitud total de carrocería de 4,59 m y un maletero con capacidad útil de 535 litros. Se trata, por lo tanto, de un vehículo con elevada funcionalidad, apto para un uso familiar.
Sus espectaculares proporciones y el diseño descendente del techo perfila una línea muy deportiva que se combina con unos voladizos cortos y una parte frontal que provista de fuerte personalidad. Siempre es opinable, pero nos parece uno de los SUV más atractivos del panorama actual.
Fiel al objetivo de lograr máximo compromiso medioambiental, en su interior destaca la utilización de materiales reciclados que se combinan con un diseño minimalista. En el puesto de conducción destaca la consola orientada al conductor, dividida en áreas separadas y que integra dos pantallas. Por su parte, el volante cuenta con superficies táctiles que sirven para controlar la instrumentación digital.
Aunque la habitabilidad no es el punto fuerte del vehículo, las plazas traseras ofrecen una anchura aceptable para que viajen tres personas y una distancia entre filas de asientos suficiente. Los ocupantes de los asientos posteriores disponen de buena altura al techo, siempre que no sean personas con estatura por encima de 1,90 m. El maletero supera holgadamente los 500 litros de volumen y su acceso es óptimo.
Gran carro
El Q4 Sportback 45 e-tron equipa una batería con capacidad de 77 kWh y un motor eléctrico situado en el eje trasero, con potencia máxima de 286 CV. El rendimiento de este propulsor es satisfactorio, logrando una enérgica aceleración de 0 a 100 km/h, de 6,7 segundos. Por su parte, la velocidad máxima está autolimitada a 180 km/h. En materia de consumos, circulando a velocidades legales es posible obtener medias entre 18 y 20 kWh/100 km.
En el apartado de recarga, la marca de los cuatro aros ofrece la posibilidad de utilizar corriente continua de hasta 135 kWh y este automóvil incluye una función de protección de la batería que la mantiene de forma automática en el estado de carga ideal. Teóricamente, es posible recuperar del 0 al 80% de batería en apenas 28 minutos y, en caso de utilizar un cargador de 11 kWh, son necesarias unas 8 horas.
Aunque el Q4 Sportback 45 e-tron supera las dos toneladas de peso en vacío, la conducción es divertida y el comportamiento es ágil incluso en las carreteras más viradas. El conductor cuenta con la posibilidad de regular la retención en tres niveles, gracias a las levas ubicadas en el volante.
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Cualidades
El conductor dispone también del modo B (Brake), que se activa mediante la minimalista palanca del cambio y proporciona una retención muy elevada -nivel 3 de levas-. También permite recuperar energía de forma más rápida. Utilizando este modo casi no es necesario frenar, ya que el vehículo se detiene al soltar el pedal del acelerador.
El Q4 Sportback e-tron ofrece un excelente aislamiento acústico, haciendo que los viajes sean un verdadero placer para sus ocupantes. De hecho, es un automóvil muy cómodo, que cuida mucho tanto al conductor como al resto de pasajeros.
En el apartado dinámico, Audi demuestra su saber hacer y ha creado un eléctrico donde la eficiencia no está reñida con la emoción al volante. El sistema Audi drive select ofrece los modos de conducción necesarios para afrontar cada circunstancia, incluyendo un individual personalizable para satisfacer cualquier deseo. El tipo de conducción, el recorrido y otros factores influyen directamente en la autonomía real del vehículo.
Potencial
Al volante de este Q4 45 e-tron, rápidamente se aprecia su condición de automóvil muy seguro y con un elevado paso por curva, potenciado por la baja ubicación del centro de gravedad y por una distribución equilibrada del peso. El tren de rodaje deportivo desarrollado por Audi permite disfrutar de una amortiguación más firme, de un tacto general de conducción más deportivo y de unos niveles de estabilidad sobresalientes.
En cuestiones de autonomía, cuando se trata de conducir en autovías y carreteras, permite alcanzar. E incluso superar los 400 km con carga en condiciones reales de utilización. No obstante, como sucede en todos los eléctricos, el tipo de conducción, recorrido y otros factores (como la temperatura exterior) pueden influir mucho en la cantidad final de kilómetros lograda.