FARÁNDULA. El futbolista hondureño, Roger Casalegno, conocido como el «CR7 hondureño», sufrió un atentado la noche del miércoles por parte de desconocidos que dispararon más de diez veces en la vivienda que alquila en San Esteban, Olancho.
De acuerdo con el deportista, se encontraba dentro del domicilio con una amiga cuando le llegó una llamada donde lo amenazaban con que lo iban a matar.
«Yo estaba en mi casa en San Esteban, cuando menos acuerdo me cayó una llamada amenazante; un hombre me dijo que iba a venir a mi casa a matarme. Yo no tuve otra que decirle que él sabía lo que hacía porque yo no me meto con nadie», explicó.
Contó que tras cortar la llamada miró que una camioneta se acercó a su casa y varios sujetos comenzaron a disparar para luego retirarse.
Fueron al menos 10 perforaciones de bala la que le hicieron a la pared y ventana del futbolista, quien, por fortuna, no salió herido.
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Lo deja todo en manos de Dios
Casalegno aseguró no tener idea del porqué los desconocidos se han ensañado en su contra que hasta quieren verlo muerto. Según explicó, solo puede imaginar que hay alguien que le tiene envidia pues afirma no tener problemas con nadie.
«La gente es envidiosa y empiezan a pensar mal de uno, tal vez porque uno va a un lugar, es admirado, pero por ahí viene eso, por envidia«, relató.
Pese al atentado que casi le arrebata la vida, el jugador explicó que no pondrá denuncia ya que deja todo en manos de Dios.
