TEGUCIGALPA, HONDURAS. En horas de esta mañana un bus «rapidito» de la ruta de transporte La Sosa-Carrizal, sufrió un ataque a balazos por parte de supuestos extorsionadores en el sector del bulevar Fuerzas Armadas de Tegucigalpa.
En ese sentido, los disparos que propiciaron los malhechores destruyeron el vidrio trasero de la unidad de transporte. El bus «rapidito» quedó varado en esta zona de la capital, casi a la altura de los puentes de El Carrizal.
Por motivos de seguridad y luego del violento atentado, los transportistas decidieron realizar paro de labores para exigir seguridad en sus unidades. Por lo cual, los buses de esa ruta no están laborando desde las 12 del mediodía.
Según los transportistas, el ataque lo realizaron miembros del crimen organizado que se dedican al delito de la extorsión al rubro del transporte.
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Transportistas viven en zozobra
El servicio de rapiditos se paralizó y decidieron ubicarse en la calle principal del sector de El Carrizal. Los transportistas anunciaron que en el paro de labores hay cerca de 80 buses. Con esta acción exigen una respuesta ante los múltiples atentados que sufren desde hace varios años, donde pierden la vida y no existe investigación ante estos hechos.
Los conductores de los rapiditos señalaron que en el país no hay seguridad, ni justicia y que no pueden seguir en la misma situación de zozobra que viven a diario.
Aunque en el atentado que se dio esta mañana ninguna persona perdió la vida, la amenaza a la integridad de los chóferes y los usuarios se mantiene al acecho.
Los transportistas sostuvieron que se mantendrán paralizados de sus labores hasta lograr una respuesta por parte de las autoridades. Indicaron que las muertes de las personas que laboran en el rubro son muchas y que hasta ahora no hay una solución para erradicar este flagelo.
