Redacción. El Congreso Nacional (CN), en la sesión ordinaria de este miércoles, aprobó la ley para la creación de un protocolo de atención de casos en riesgo de suicidio en los centros educativos en Honduras.
El decreto establece que deben dar asistencia prioritaria a jóvenes que presenten conductas suicidas.
La nueva medida está orientada para aplicarse a nivel de educación primaria y secundaria, en el sector público y privado. La ley indica que el protocolo consistirá en la detección, atención, vinculación y seguimientos de los estudiantes en riesgo.
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Los entes encargados de crear e implementar el protocolo serán la Secretaría de Educación y Secretaria de Salud. Además, la ley establece la creación del comité para la prevención, atención e intervención de los centros. Así como la ejecución de campañas de prevención.
Ramón Discua propuso la iniciativa
El diputado del Partido Nacional de Honduras, Ramón Fernando Carranza Discua, detalló que este tipo de personas enfrentan desafíos y requieren ayuda. Igualmente, encaran presiones que muchas veces resultan abrumadoras.
Por ello, sostuvo que es responsabilidad de los parlamentarios dar las herramientas necesarias a quienes tienen luchas internas.
“La aprobación de este protocolo es una manifestación de nuestro compromiso colectivo con los estudiantes. Ese documento no sólo es una guía, es una promesa de que cada estudiante será escuchado, de que sus problemas no serán ignorados y que siempre habrá alguien dispuesto a tender una mano amiga en momentos de necesidad”, expresó Carranza.
El diputado indició que el suicidio es una tragedia que deja cicatrices imborrables en la familia, comunidades y escuelas. Es por eso que a través de este protocolo pretenden crear un ambiente escolar donde cada alumno se sienta valorado, comprendido y apoyado.
«Implementaremos programas educativos que enseñen a los estudiantes sobre la importancia de la salud mental. Se facilitará el acceso a consejeros capacitados y se promoverá una cultura de empatía y auxilio mutuo», agregó.
El protocolo es el resultado de la colaboración de muchos expertos en salud mental, educadores y junta de padres de familia que trabajaron incansablemente.