Piratas informático de Anonymous y de Hackback han hackeado la web del poderoso Club Bilderberg.
Han colgado en su página de inicio un texto amenazante en el que dan a sus miembros un plazo de 365 días, es decir un año, para que cumplan sus reivindicaciones.
“Queridos miembros de Bilderberg: a partir de ahora cada uno de ustedes tiene un año (365 días) para trabajar verdaderamente a favor de la gente y no en aras de sus intereses privados”, escribieron los hackers este viernes.
“Cada tema del que hablen o el trabajo que cumplan por medio de sus reuniones más que privadas tendrán que beneficiar a partir de ahora a la población mundial y no a un grupo Y o X de la gente”, prosiguen.
«Ustedes no van a estar seguros en ningún lugar donde haya electricidad»
“Vamos a encontrarlos y a ‘hackearlos’”. “Vamos a vigilarlos, porque a partir de ahora tienen que trabajar para nosotros, para la humanidad y para la gente”, concluyen.
Los hackers aseguran además haberse hecho con el control de “sus coches de lujo y dispositivos de seguridad de sus casas conectadas”.
Así como de “las computadoras portátiles de sus hijas y los móviles de sus esposas”.
“Grabamos sus reuniones secretas, leemos sus correos electrónicos, controlamos los relojes inteligentes de sus chicas escort favoritas, estamos dentro de sus queridos bancos y estamos leyendo sus activos».
«Ustedes no van a estar seguros en ningún lugar donde haya electricidad”, afirman.
Surgido en 1954, el club Bilderberg envuelve un aura de misterio que se magnifica con el paso del tiempo.
Y es que las deliberaciones, al más alto nivel, se hacen a puerta cerrada, sin comunicado oficial y sin resoluciones.
Todo secreto, nada público. Una característica que choca con su objetivo, que es impulsar el diálogo entre Europa y Norteamérica.
Asimismo, en la última reunión celebrada en verano en la ciudad alemana de Dresde, fueron invitados entre otros Christine Lagarde, directora gerente del FMI.
También, Wolfgang Schäuble, ministro de Finanzas alemán; José Manuel Durao Barroso, expresidente de la Comisión Europea (CE); el rey Guillermo de Holanda; o los primeros ministros de Bélgica y Holanda.
Finalmente, en el terreno empresarial, acudieron John Cryan, presidente de la junta directiva del Deutsche Bank; Thomas Enders, presidente de Airbus; Michael O’Leary, director ejecutivo de Ryanair; o John Elkann, presidente de Fiat Chrysler.
