TEGUCIGALPA. El analista hondureño Josué Murillo afirmó que la presidenta electa, Xiomara Castro, está siendo firme en su posición de cambio y mantiene su promesa de cambiar la manera de hacer política en Honduras.
El analista indicó que de inicio se despertaron muchas expectativas, sin embargo, días después se ha degenerado una especie de «circo político«, algo que supuestamente iba a desaparecer.
Pese a las esperanzas, Murillo destacó que es muy difícil cambiar la cultura política de Honduras.
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Altos y bajos
Murillo dijo que ha escuchado con mucha atención las posturas políticas y, más que todo, los altos y bajos que se han ido presentado dentro del Partido Libertad y Refundación (LIBRE). Asimismo, ha analizado las opiniones que vienen del Partido Salvador de Honduras (PSH).
«Ayer escuchaba a varios analistas políticos sorprenderse de que personas muy cercanas al expresidente Manuel Zelaya Rosales, a la Presidenta Xiomara Castro, estén armando otro frente dentro del Partido LIBRE», pronunició el analista.
Por esa razón, recalcó que no se sabe si estas acciones son por falta de lectura precisa de la política real del país o quizás es que les falta un poco «bagaje literario».
Josué Murillo recordó que la historia muestras que la traición no viene de los enemigos ni de los opositores ni de los detractores, sino más bien llega de la gente más cercana.
«La traición más fuerte y la que se ha dado en la historia de la humanidad ha sido de las personas en las que uno deposita la confianza. Eso es precisamente lo que estamos presenciando en este momento», añadió Murillo.
Juego de los puestos
Josué Murillo destacó que no hay duda de que cuando se juega un puesto importante en la vida institucional de un país, como la presidencia del Congreso Nacional, siempre se van a mover intereses lesivos.
«Recordemos que el Congreso ha sido el epicentro de la corrupción y donde se han gestado las decisiones más degradantes, más lesivas a los intereses del pueblo, que siempre se iban a mover y los políticos que se iban a tratar de generar fracciones», agregó.
Murillo reaccionó ante Radio Cadena Voces sorprendido porque creyó que a la reunión que se celebró la noche de ayer iban a llegar los diputados de LIBRE en oposición.
El acuerdo es legal
«Se ha mantenido este grupo detractor al acuerdo, un acuerdo que, por cierto, es legítimo, es válido, porque fue firmado por las autoridades del Partido Libertad y Refundación y el Partido Salvador de Honduras y que fue respaldado por el pueblo hondureño», recordó Murillo.
Por último, el analista recordó que el pueblo espera que sí se cumplan las promesas de los políticos y que no sean palabras que se las lleva el viento.
«Lo que me llena de esperanza y me llena de felicidad es que la presidenta electa de Honduras está siendo firme y está manteniendo su palabra», concluyó.
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