Redacción. Allan Josué Guerrero Velásquez era un joven médico apasionado por las motocicletas y el fisiculturismo, que falleció en la carretera CA-5, haciendo lo que más le gustaba.
Él se conducía en su vehículo de dos ruedas cuando perdió el control y se accidentó. El fuerte golpe le provocó la muerte.
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Iba con su hermano y otras amistades, un grupo biker que solía reunirse para montar y recorrer el país. Varios fotógrafos incluso captaron los últimos minutos de vida de Allan, cuando iba transitando en su motocicleta.
Tras su fallecimiento, muchas personas que lo conocieron o convivieron con él se han pronunciado.
«Allan Guerrero un apasionado por el fisiculturismo y las motocicletas, también brilló en la medicina. Cumplió sus valores como hijo y ciudadano. Fue un hombre integro, fino y con las enseñanzas de las virtudes de un ciudadano ejemplar», escribió la página de Míster Honduras Humanidad.
«Recordemos que Allan ganó ante 19 delegados del país, y construyó varias letrinas en los bordos, para más de 258 niños en extrema pobreza, en su año de reinado. Asimismo dando ejemplo de voluntariado en el área de la salud, no sólo fue física, fue cerebro y corazón», agregaron.
Campeón
Allan fue rey nacional y representó a Comayagua en 2019. También ganó como míster intelecto, mejor cuerpo y se llevó el primer lugar en labor social. Por otro lado, se coronó campeón de la Federación Nacional de Fisiculturismo y Fitness de Honduras.
Ellos igualmente se pronunciaron tras la muerte del joven hondureño. A través de una nota de duelo detallaron que Allan amaba el deporte y su profesión.
«Se destacó en los eventos más importantes de Fisicoculturismo como el Sr. Deportista, Sr y Srita Honduras ostentando varios títulos nacionales y recién había ingresado a formar parte de la Selección Nacional de Fisicoculturismo. Actualmente se estaba preparando para su primer competencia internacional XI Campeonato Centroamericano en Guatemala», expresaron.
«Doctor en Medicina General y Cirugía, Recientemente había recibido el 19 de Abril la especialidad de Podiatria de la Universidad Maristas de Guadalajara, México», añadieron.
Su velatorio se lleva a cabo en la colonia Alameda de Tegucigalpa. Una de sus vecinas relató que Allan «era un muchacho intachable, dedicado a sus estudios, sin ningún vicio, con una conducta fenomenal».
La fémina sostuvo que «parece una pesadilla». Además, recordó al joven como un ser humano bastante servicial, callado, educado y un gran amigo.
Mensaje de su hermano
Jorge Guerrero, hermano de Allan, iba con él cuando ocurrió la tragedia. Ambos se conducían en diferentes motocicletas pero Jorge observó todo.
«Hermano mío, tu pasión por las motos era tanta que te llevó y la felicidad que llevábamos era inmensa. Estábamos tan alegres de lograr lo que tenemos, la pasión que compartimos, la adrenalina que sentíamos, lo hermoso que es sentir el viento, curvear, correr, sentarnos a platicar del día de las motos, de como nos fue, de lo bonito que es, tantas cosas que no puedo expresar», escribió Jorge en una publicación.
«La gente sabe lo genial que eras tu personalidad y el amor a tu trabajo todo. Te me vas con lo que más te gustaba. Te amo. Fue y será siempre el mejor placer compartir hasta el último la carretera con vos, se que estás conmigo y andarás conmigo siempre», concluyó acompañado el mensaje de una fotografía donde salen ambos en sus motocicletas.