Redacción. Diversas instituciones bancarias de Honduras han advertido recientemente a sus usuarios sobre una red de «phishing» o ciberestafas a través de correos electrónicos falsos.
La estafa consiste en que personas ajenas a las instituciones bancarias se hacen pasar por agentes de seguridad de las mismas, con el fin de obtener información privada sobre sus cuentas de ahorro.
A esta práctica delictiva también se le conoce como phishing, una técnica de ingeniería social que consiste en el envío de correos electrónicos que suplantan la identidad de compañías u organismos públicos y solicitan información personal y bancaria al usuario.
Correos engañosos
Asimismo, Diario Tiempo fue testigo de una de las denuncias ciudadanas con la práctica electrónica engañosa.
En la imagen compartida por un usuario anónimo se puede observar un mensaje de correo electrónico de una institución bancaria nacional que parecer ser de lo más común y auténtico.
El mensaje comunica al cliente supuestos problemas técnicos en el sistema. Además, informa que debido a diversos cambios en la plataforma, el usuario debe validar nuevamente sus datos por un nuevo protocolo de seguridad.
Seguidamente, los estafadores amenazan al cliente bancario con eliminar o suspender su cuenta por no acatar su solicitud.
Sin embargo, al revisar más minuciosamente el correo eléctrico del emisor, se puede ver que el mismo pertenece a una cuenta de un particular y no a la institución bancaria, como aparece en el mensaje.
En ese sentido, Rigoberto Fernández, experto en temas de seguridad con una trayectoria de más de 30 años en seguridad preventiva integral, aconsejó a los hondureños a ignorar y denunciar a las cuentas de correo electrónico falsas.
«Los bancos tienen correos institucionales, ellos no abren en gmail, hotmail u otros», manifestó.
De igual manera, las diversas instituciones bancarias que operan en Honduras hacen un llamado a sus clientes a no caer en estas estafas.
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Otras formas de ciberestafa
Una de las formas más comunes de fraude es por medio de llamadas telefónicas. Las mismas consisten en un supuesto aviso del banco, que informa sobre un problema informático o movimientos inusuales en las cuentas o tarjetas.
La persona al otro lado de la línea con frecuencia utilizará un protocolo similar al de atención al cliente y en algunos casos hasta ponen de fondo música o mensajes publicitarios del banco.
La trampa consiste en que por «seguridad» pedirán al usuario brindar sus datos de acceso bancarios, así como credenciales para supuestamente confirmar su identidad y evitar el robo, cuando realmente el crimen está en proceso.
Redes sociales
Otra nueva y popular forma de robo electrónico se ejecuta a través de redes sociales con pomposas promociones o sorteos desde perfiles que aparentan ser de instituciones bancarias, e incluso pagando publicidad, han sido identificadas recientemente.
Ante esas publicaciones, expertos recomiendan a los usuarios tomarse el tiempo necesario para comprobar la validez de los post.
Asimismo, los perfiles oficiales de entidades financieras usualmente tienen un check de verificación de la cuenta, lo que evidencia que realmente es quien dice ser.
Recomendaciones
Finalmente, los bancos nacionales recomiendan tomar las medidas correspondientes, mismas que van desde la más sencilla, como desconfiar de todo tipo de mensajes de usuarios que el cliente no conozca, «más si es bajo la excusa de una alerta de seguridad«.
El segundo consejo es no brindar bajo ninguna circunstancia tu información sensible:
- Usuario o contraseña de banca en línea.
- Dirección y contraseña de correo electrónico.
- Numeración o PIN de tus tarjetas.
- Códigos o PIN para transferencias.
- Nunca descargar aplicaciones que no sean las oficiales de los bancos.
- No ingresar el usuario y contraseña en sitios no oficiales.
- Ante la mínima sospecha no entrar a esos correos y eliminarlos.
- No facilitar el correo que figura en el banco a otras instituciones, utilizar un correo diferente solo para el banco.
- Revisar la redacción de los correos.
En Honduras, la ciberseguridad se ha convertido en una preocupación importante para las autoridades. Según la Dirección de Investigación Policial (DPI), cada día se reportan entre 3 y 4 casos de ciberestafas, siendo el «phishing» la estafa más común.
